Te cuento la película

Código Emperador

España / Francia (2021) *

Duración: 105 min.

Música: Xavier Font, Elba Fernández

Fotografía: Pablo Rosso

Guion: Jorge Guerricaechervarría

Dirección: Jorge Coira

Intérpretes: Luis Tosar (Juan), Alexandra Masangkay (Wendy), Georgina Amorós (Marta), Denis Gómez (Ángel), Laura Domínguez (Ana), Miguel Rellán (Galán), María Botto (Charo), Fran Lareu (Chema), Juan Carlos Vellido (Azcona).

Una muchacha asiática coge el autobús y va al cine.

Ya de noche, camina por las calles de una lujosa urbanización cuando dos hombres salen de una furgoneta y tratan de introducirla dentro.

Aparece entonces un hombre que observa lo sucedido y se enfrenta a ellos y consigue sacar a la chica, haciendo que huyan, dejando al hombre que la ayudó en el suelo, herido, debiendo ayudarle la muchacha a levantarse.

La lleva luego en su coche, ofreciéndose la mujer a curarle la herida de la frente en casa de sus jefes, un chalet cercano, contándole que estos no están, planteándose él que quizá deban denunciar lo ocurrido, aunque ella no quiere hacerlo porque no quiere perder su trabajo pues sus jefes no quieren llamar la atención.

Él dice entonces haber escuchado una puerta y dice que pueden haberlos seguido, por lo que va a echar un vistazo, pidiéndole a ella que si escucha algo raro llame a la policía.

Recorre la casa colocando algunas microcámaras por la casa, para, al regresar, indicar que era una ventana en el baño.

Cuando se marcha le dice que se llama Álex, diciéndole la muchacha que ella es Wendy, dándole él su teléfono por si le apetece que la lleve algún otro sábado.

De regreso para junto a un puente y entrega dinero a los hombres de la furgoneta.

Ya en casa conecta su ordenador y controla la casa de la Moraleja con las cámaras.

Vigila también a un hombre, Ángel González y sus redes.

Se reúne al día siguiente con Galán, al que le dice que no sabe por qué se ha empeñado en Ángel González, pues no tiene nada oscuro y está en el partido desde los 18 años sin ningún problema, y no molesta ni llama la atención y lo meterán de relleno en las listas con pocas posibilidades de ser elegido, aunque Galán insiste en que tiene que haber alguien que sepa algo. Diciéndole Juan que no bebe, ni fuma ni va con mujeres, solo un poco de porno, pero normal.

Se reúne con Charo, que tiene un diario digital y necesita exclusivas porque él la animó, pero no ha obtenido nada bueno y solo la usa para hundir a gente y esperaba que la ayudara a contar la verdad, ofreciéndose él a conseguirle algo de publicidad.

Cuando llega a su casa saca un clip que coloca para comprobar que nadie ha entrado.

Recibe una llamada de Galán, que debe ayudarle a solucionar un problema en la Urbanización Los Altos sin involucrar a la policía, que está en camino.

Él llama a Azcona el comisario de Pozuelo para pedirle un favor, pidiéndole que no entre.

Lo encuentra, en efecto esperando fuera y le pide que le deje entrar y hablar con ellos, pidiéndole Azcona a cambio que le consiga una entrevista con Galán.

Dentro del chalet vive un famoso futbolista que le dice que la chica está encerrada en la habitación y no quiere salir. Que le quitó el teléfono, pero que antes llamó a la policía.

Branka, la esposa le abre, presentándose él como policía y le dice que no se preocupe, que su marido no va a hacerle nada, viendo que la muchacha tiene la cara llena de moratones por los golpes.

Entretanto el futbolista habla con el presidente del equipo y le dice que le ha roto la cara a la chica y no sabe cómo arreglarlo.

Juan le dice que la llevará a un hospital y que no se cruzará con él y que en unos meses volverá a ser la misma, diciendo ella que quiere que él se pudra en la cárcel y que todos sepan qué tipo de persona es.

Él le pregunta si pueden tener algo contra ella, pues cree que la habrán investigado y tener algo con que presionarla, diciendo ella que no tiene nada que ocultar y que su familia está en Ucrania, mostrándole Juan una foto del presidente de Ucrania negociando con el presidente del club, que es empresario, el contrato para la nueva línea de metro y la ciudad de la Justicia de Kiev, comprendiendo ella que si lo denuncia acabarán con su familia, pues hay mucho dinero de por medio, proponiéndole un trato.

Le dice luego al futbolista que no lo denunciará, pero que la policía y los periodistas esperan fuera, por lo que deben inventarse una historia para cuando la vean así, pues debe ir a un hospital, inventándose un robo con violencia, para lo que debe golpear también al futbolista, que es evacuado en una camilla.

Las ambulancias y la policía hacen su trabajo, y entre todos Charo y un fotógrafo de su periódico online, dándole esta las gracias por el aviso.

Entretanto, siguen con la investigación con el hombre de negocios alemán para el que trabaja Wendy, Schull, relacionado con grupos supremacistas neonazis, aunque no saben qué le quieren vender, y para saberlo deben intervenir su portátil.

Juan se pasa el sábado por la plaza donde está Wendy esperando el autobús y se ofrece a llevarla y van juntos al cine.

La chica le cuenta luego que son 7 hermanas trabajando por Europa y ahorrando para hacerse una casa en Filipinas y ya tienen el terreno y tendrá habitaciones para turistas.

La chica se acerca para besarlo y van a un hotel donde hacen el amor, cogiéndole Juan la llave de la casa del bolso mientras se ducha, entregándoselas a unas compañeros.

Le comenta a Wendy que el día que estuvo en la casa vio que en su habitación no tenía nada personal suyo, diciendo ella que no es su habitación, que solo vive allí y que es más fácil cambiarse.

Cuando salen del hotel se cruzan con la compañera que le devuelve a Juan las llaves.

Con ellas entra en la casa cuando sale el propietario, ocultándose de Wendy y revisa el dormitorio, viendo que en él hay una cámara dirigida al zapatero., por lo que concluyen que lo que buscan debe estar escondido tras este.

Se reúne de nuevo Galán, que le recrimina que se ensañara con el futbolista, que debido a sus golpes tiene que perderse entre tres y cuatro partidos.

Le cuenta que Ángel, el político tiene un perfil falso en redes sociales para poder hablar sin que sepan que es un político, sobre series o tatuajes raros.

Vigilan la actividad en casa de Schull, viendo que oculta tras el zapatero una caja fuerte, pudiendo ver la clave cuando la pone, y que saca de ella un portátil.

Vuelve el sábado a por Wendy a la que le recrimina no haberle mandado ningún mensaje en 7 días, volviendo a la casa, donde, mientras ellos hacen el amor, varias personas del equipo entran y copian la información guardada en el portátil.

Examinándolas, ven que trafica con material radioactivo. Con Cobalto 60, que se usa para medir el grosor de metales y plásticos en centros médicos o para esterilizar material, pero que si se conecta con una bomba, puede contaminar una ciudad entera, descubriendo que proviene de un hospital militar abandonado de Argentina, debiendo averiguar por dónde meterán el material, pensando que utilizarán las redes de distribución de drogas.

Juan le pide a Chema, uno de sus colaboradores que le cree un perfil falso de una chica de 19 años, dándole algunas fotos.

Con ello se hace pasar en las redes por Sara, y consigue que el político contacte.

Budapest

Se entrevista allí con un tipo, al que incautaron 50 kilos de coca en España y dice que se los devolverá a cambio de información.

Consigue así enterarse de que el material entrará por el puerto de Bilbao.

De regreso a España acude a una discoteca conde contacta con el tipo que debe conseguir la coca prometida a su informador.

Pero también se encuentra allí con Marta, una muchacha que le dice que trabaja allí porque no quiere que su padre la ayude con el pago de sus estudios.

Ignora que Galán ha contactado con Ana, una compañera para investigarlo a él.

Recibe un mensaje de Wendy preguntándole si ya no le gusta el cine, uniéndose a ella con la película iniciada y vuelven a acostarse, extrañándole que ella no quiera saber más cosas sobre él, que aprovecha para preguntarle en qué trabaja, contándole que es detective de una agencia de seguros.

Haciéndose pasar por Sara chatea con Ángel González, proponiéndole él abrir la cámara, contraatacando él, pidiéndole que se vean de verdad.

Entretanto tratan de localizar el material en el coche de un tipo que trabaja en la grúa del puerto, pero no localizan el material ni ven que se cruzara con nadie, viendo, tras revisar las imágenes de las cámaras que entregó las llaves de un coche al de la garita, viendo cómo este saca luego un paquete de un coche que sube al suyo.

Lo siguen, viendo que entrega el paquete a dos individuos en un barco, concluyendo que se trata de una muestra que van a analizar antes de finalizar el negocio.

Un día, limpiando, Wendy descubre una de las cámaras.

Juan, entretanto acude a la universidad donde busca a Marta a la que le hace una proposición aunque ella le dice que no es una puta, diciendo él que si pudiera hacerlo una prostituta no se lo pediría a ella, diciéndole ella, enfadada, que cuando tenía 15 años estaba enferma y enganchadísima, recordando él que la ayudó a salir del embrollo, recordando ella que le prometió que nadie vería el video, diciendo él que nadie lo ha visto. Que querían vender el reportaje a una revista y él lo evitó.

Ella dice que la chantajea, diciendo él que le pide un favor.

Cuando le muestran luego a él el descubrimiento de la cámara, él les hace observar que Wendy no se lo dijo a nadie y no les conviene hacer cambios que hagan que sospechen, yendo luego él a verla y la encuentra haciendo la maleta y sin querer escucharlo, diciéndole él que no puede explicarlo, pero que necesita que se quede allí porque está haciendo algo importante y debe confiar en él, aunque ella se muestra reacia.

Ella le pregunta por qué volvió, pues ha comprendido que la primera vez la engañó para entrar, pero no entiendo por qué volvió, diciendo él que volvió porque quería estar con ella y que lo que hay entre ellos es verdad, aunque entiende que se sienta engañada.

Le dice que ella sabe que sus jefes ocultan algo y que no dejarán que nadie ponga en peligro los negocios que tienen entre manos, por lo que si se va, la encontrarán y la quitarán de en medio.

Cuando sale, le dice a Ana que se quedará y no dirá nada.

Marta acude con peluca y muy elegante a una terraza donde está ya Juan, que la cita en un reservado VIP, donde ambos comprueban que sus fotos en redes son diferentes.

A la salida le cuenta a Juan que le dijo que, aunque no es lo que buscaba, pueden seguir hablando y conociéndose. Que le vio nervioso y no sabe si desaparecerá, pues está convencida de que era la primera vez que lo hacía.

Le avisan de que el cobalto ya salió de Argentina.

Pero Galán vuelve a recurrir a él, pues le necesita para que intervenga en un asunto en Panamá, diciendo él que tiene otro tema muy importante que le impide marcharse, aunque Galán le dice que serán como mucho tres días y si lo hace le relevará en el caso de Ángel González y se lo pasará a Azcona, ahora con ellos y menos escrupuloso.

Acepta aunque indica que seguirá él con lo de Ángel González.

Ciudad de Panamá

Se reúne con Naranjo, que se volvió de Madrid 5 años atrás y con debe negociar.

Tienen a un Juez del Supremo en una habitación del hotel.

Le muestra la ficha de un joven que vendía droga y al que el juez conoció en un bar, habiendo muerto el chico al caer desde su habitación, habiendo logrado que no trascendiera diciendo que el chico resbaló desde la terraza tras un ataque epiléptico, pero deben compensar tanto a la familia como a ellos para que les ayuden, dándole él un maletín con dinero, diciéndole Naranjo que ellos no quieren dinero, entregándole unas fotos de un banquero panameño divirtiéndose con un chapero en Chueca.

Tras el intercambio, Naranjo le lleva al juez del supremo y su pasaporte.

Le dice al juez que le contaron a su mujer que no pudo volver debido a un incidente diplomático, diciendo el juez que en realidad fue una trampa, asegurando que no contrató los servicios de ningún chico, estando convencido de que lo prepararon ellos todo, asegurando que no se va a dejar amilanar y que, en cuanto llegue a Madrid, investigará, pues sabe que quieren tener el control de togas.

Pero Juan le muestra las fotos del chico. Le dice que el chico sufrió un ataque epiléptico, él se asustó y para que no lo encontraran allí lo tiró por el balcón, algo que nadie pudo preparar.

Cuando llega a España le está esperando Ana que le dice que el material llegó ya a puerto y deben irse ya.

Bilbao

Vigilan un edificio controlado por los hombres de Schull. Un edificio complicado de controlar porque los pisos se comunican entre sí, por lo que, dice, deben entrar ya.

Ana y un compañero dicen a un camello que quieren speed y los lleva al edificio lleno de yonkis drogándose, y donde como uno más está ya Juan.

Este comienza a inspeccionar el edificio y sube hasta la azotea, donde saca su arma mientras busca entre frigoríficos llenos de droga, descubriendo un agujero secreto tras uno de ellos, debiendo atravesar el hueco del ascensor sobre un tablón para llegar a una habitación donde, al abrir un arcón frigorífico encuentra una caja, donde está, en efecto, el cobalto, aunque justo entonces lo descubren y le disparan, por lo que Chema, que lo controla todo desde su portátil avisa a Ana, y la va guiando.

Juan logra sorprender a su perseguidor, aunque este logra dominarlo, no acabando con él gracias a la llegada de Ana, que lo detiene.

A la vez, la policía entra en el domicilio de Schull y detiene al matrimonio.

Wendy, que está sola al cine ignora que Juan está en la sala, detrás, escribiendo a Ángel como si fuera Sara.

A la salida se presenta a Wendy y le pide que no regrese a casa, pues hay policías, ofreciéndole que se quede en su casa hasta que encuentre algo.

La lleva en efecto, observando Wendy que tampoco él tiene muchas cosas, diciéndole que podrían intentar desaparecer juntos y conoce un lugar donde no los encontrarán.

Se celebra una gala en que participan empresarios, artistas y políticos, como Ángel González, o Fernando el futbolista maltratador y en la que está Marta trabajando como camarera y el juez del Supremo al que Juan trajo de Panamá.

Cuando ve a Marta, Ángel la sigue hasta la escalera, adonde ella salió a fumar.

El político se excusa por sus mentiras, indicando que no puede ir diciendo que es diputado, aunque lo que Marta / Sara, le recrimina es que no le contara que estaba casado, aunque le dice también que no está enfadada, pues lo entiende, pues todos tienen secretos y que pueden volver a verse, diciéndole él que tiene alquilada una habitación para esa noche.

Van juntos, en efecto, a esta y se desnudan para acostarse mientras Juan lo graba todo, con cierta incomodidad.

Tras hacer el amor, Marta va al baño y se golpea contra el lavabo, rompiéndose la nariz y sale luego corriendo de la habitación, saliendo a buscarla Ángel en calzoncillos, aunque no logra alcanzarla, ocultándola Juan en otra habitación desde la que grabó todo, yendo él a la habitación del diputado, haciéndose pasar por policía.

Le dice que la chica quiere presentar cargos, aunque él insiste en que fue allí por voluntad propia, diciéndole Juan que ella dice que la forzó, diciendo él que tuvieron relaciones de mutuo acuerdo.

Juan entra al baño y coloca en la repisa del mismo algo de coca.

Marta escucha la conversación cuando le habla de la cocaína y cuando le dice, mostrándole el D.N.I. de la chica, que esta era menor, aunque él indica que ella le dijo que tenía 19 años y le muestra sus conversaciones en redes, para lo que debe reconocer que él se hace pasar por Sergio, pidiéndole Juan que se identifique.

Le dice luego que cree que le tendieron una trampa, y le pregunta quién cree que pudo ser, pues suele ser gente cercana porque suponga un peligro para alguien, diciendo él que ni siquiera figura en las listas de ese año, diciendo que quizá tenga información sensible que quieran neutralizar, aunque él asegura que no hay nada, o si no, sería la chica para sacarle dinero.

Cuando regresa a la habitación ve que no están ni Marta ni el ordenador, por lo que sale corriendo hasta su casa, viendo que destrozó el portátil a martillazos, preguntándole el chico si no le da asco, pues cuando le escuchó hablando con Ángel recordó el tono que utilizó con ella años atrás.

Pese a todo, él consigue rescatar la copia de seguridad.

Vuelve a reunirse con Galán, que les felicita por lo de Bilbao, aunque dice que todavía deben atrapar a los vendedores y la célula de Alemania a donde irá en unos días.

Miente, diciéndole que lo de Ángel no funcionó, pues en el último momento se marchó, diciendo Juan que el partido va a prescindir de él.

Regresa a casa, pero no encuentra a Wendy, pudiendo ver en el ordenador que la detuvo Azcona, por lo que acude a la comisaría y se enfrenta al comisario, diciéndole que no tiene nada contra Wendy, que no hizo nada, que solo trabajaba en la casa y le pregunta qué le prometió Galán y que la tendrán que soltar, pues no tienen nada, aunque Azcona le recuerda que la chica no tiene permiso de trabajo, por lo que le recomienda que se porte bien o se encargará él personalmente de que sea deportada.

Juan va a ver a Charo y le entrega un disco duro encriptado y que el código para abrirlo le llegará en cuatro horas si no lo para antes.

Acude tras ello a una recepción en honor a Galán, vestido con uniforme militar de gala y le pregunta cuánto tiempo llevan siguiéndolo, diciéndole que un hombre sin familia ni relaciones sentimentales ni vicios tenía que explotar por algún lado, pero que solo quieren poder confiar en él.

Que le pasó lo mismo que a Ángel González, pues la gente tan limpia es la más peligrosa, pues es imprevisible, ya que pueden tener ideas propias, pero que al final elegirán a Ángel para la limpieza que los votantes piden ahora que sabe que nadie puede encontrarle nada.

Le asegura que no deportarán a Wendy, pues le necesitan.

Va a esperar a Wendy cuando sale de prisión y van a un bar, donde le pide perdón y le entrega un sobre, diciéndole que allí está todo lo que necesita, viendo que hay en él mucho dinero y un billete de avión para Filipinas, observando ella que hay solo un billete, diciéndole él que todavía tiene cosas que arreglar allí.

Le pregunta si se llama Álex, diciendo él que se llama Juan, confesando ella que se llama Abaday y lo besa antes de marcharse, recordándole lo de la casa de huéspedes junto al mar y que estará allí.

Ve que quedan solo unos minutos para que le llegue el código a Charo, pero no hace nada.

Entretanto imponen una medalla a Galán.

Salen informaciones de que Ángel González se encargará de coordinar el grupo parlamentario.

Pasadas las cuatro horas, le llega a Charo un correo donde pone: "Código: EMPERADOR", y cuando introduce la clave se desbloquen múltiples carpetas con todos los casos investigados por Juan.

Este deja su casa y se marcha sin fijarse que el clip que dejaba en la puerta está en el suelo abierto.

Calificación: 3