Te cuento la película

Bajo el peso de la ley

Down by Law (1986) * USA / Alemania

Duración: 107 Min.

Música: John Lurie (Canciones: Tom Waits)

Fotografía: Frederick Elmes

Guion y Dirección: Jim Jarmusch

Intérpretes: Tom Waits (Zack), John Lurie (Jack), Roberto Benigni (Roberto / "Bob"), Nicoletta Braschi (Nicoletta), Ellen Barkin (Laurette), Billie Neal (Bobbie), Rockets Redglare (Gig), Vernel Bagneris (Preston), Timothea (Julie), L.C. Drane (L.C.), Joy Houck, Jr. (Detective Mandino).

Jack se despierta junto a una joven negra. Se asoma a la puerta y allí hay otra joven que dice estar mirando cómo cambia la luz.

Regresa a la cama y al abrazar a la mujer despierta a esta.

En una calle cercana la policía detiene a un hombre.

Cerca de allí, al despertarse, un hombre, Zack llega a casa y entra en una habitación donde duerme una mujer que se despierta mientras él se desnuda.

Poco después ella, Laurette, comienza a tirar sus discos y libros a la calle, diciéndole que no la quiere ni quiere ningún compromiso con ella ni la cuida, y le dice que quiere romper para siempre, pues está harta de él y de sus programas de radio y que tal vez debería volver a Detroit, Baltimore o Nueva York y pedir una nueva oportunidad en una de esas emisoras, no entendiendo que le cueste tanto pedir ayuda y dar un poco de coba, afirmando él que no da coba a nadie.

Ella le dice que no le volverá a hablar ni quiere que juegue más con ella, y que ha sido idiota por estar con él.

Zack, que no hizo nada mientras tiraba el resto de sus cosas, le pide que no tire sus zapatos, retándolo ella a que le pegue.

No lo hace. Los recupera luego en la calle y se los pone, no importándole el resto de cosas, dejando allí los viejos.

A Jack, la mujer con la que se acostaba, le reprocha que no ahorre nada para hacer algo juntos, pues lo derrocha en juego, drogas y mujeres, asegurando él que tiene que divertirse, recordándole ella que todas las mujeres con que comenzó están hechas polvo y que no comprende a las mujeres, que es lo que se espera de un chulo, pues de ser un buen chulo ya le habría pegado.

Jack recuenta el dinero y no le hace caso ni se ofende.

Reciben entonces una llamada del "Gordo", que, le dice, tiene algo que le va a interesar.

Lo recibe allí mismo poco después, diciéndole el hombre que sabe que piensa mal de él desde lo del soplón en Jefferson Parish y ha ido para arreglarlo y olvidarse del pasado.

Le dice que tiene a una chica de 19 años, criolla en Belle Chase el hotel.

Jack decide ir a ver la mercancía, aunque advirtiéndole que si es falso acabará con él.

Llega a la habitación del hotel, que encuentra abierta, viendo a una joven en la cama a la que le dice que le han dicho que busca a alguien que la cuide y él no la pegará ni rajará, y además ganará dinero.

Pero de pronto entran varios policías, y él dice que es su novia, y cuando encienden las luces ve que es una menor, por lo que se lo llevan, quedándose el policía al mando, Mandino, con la pequeña, y le dice que él se ocupará de ella.

Zack canta borracho cuando se le acerca un italiano que va apuntando en una libreta las palabras que no conoce, como pirarse, lo que le dice Zack.

Poco después lo encuentra Preston, que le dice tiene un trabajo para él. Le dice que le dará 1.000 dólares por una hora de trabajo, debe llevar a alguien en un coche de un punto de la ciudad hasta otro, siendo el coche un Jaguar.

Ante el dinero fácil, que le dan por adelantado, conduce en efecto el coche en medio de la noche, mientras se asegura a sí mismo que a Detroit no volverá seguro, y comienza a presentar canciones como si estuviera trabajando.

Pero de pronto empieza a perseguirle la policía, que le obliga a parar.

A punta de pistola le obligan a salir del coche. Y le ponen las esposas y abren el capó, en el que ven el cadáver de un hombre.

Jack y Zack acaban en la Orleans Parish Prison compartiendo celda.

Zack le dice que no es el único inocente allí dentro, que se la han jugado como a él, aunque Jack le dice que no son iguales, que para él Zack ni siquiera existe, respondiéndole este que él tampoco existe, ni existe nada de lo que está allí.

Pero unos días después es Jack quién pregunta a Zack qué le ronda la cabeza, pues lleva tres días sin decir ni una sola palabra, a lo que este solo le responde "jódete".

Jack le cuenta que cuando salga le esperará una limusina llena de chicas y disfrutará del lujo del coche y de las chicas.

Zack le dice que es gilipollas por montarse esa historia.

Jack le pregunta si es barrendero, contándole Zack que es DJ, preguntándole Jack de qué emisora. Le cuenta que Wyld, donde es Lee Baby Simms, y le pide que se lo demuestre diciendo algo, haciendo una presentación para él, no entendiendo Jack que siendo DJ le cueste tanto hablar.

Zack se entretiene contando los días pintándolos en la pared, lo que hace que Jack se enfade, pues, dice, así hace que pase menos rápido, por lo que acaban peleándose.

Un día llevan a su celda a otro preso que dicen es homicida y ni siquiera habla inglés.

Saca su libreta para decir que si una mierda puede matar está muerto, tras lo que se presenta como Roberto, aunque sus compañeros de celda no le hacen caso.

Él repite allí alguna de las frases ingeniosas que se apuntó en su libreta.

Le pregunta a Jack por qué lo metieron en la cárcel y le cuenta que le pringaron, aunque es inocente, contando lo mismo Zack.

Pero Roberto no. Él cuenta que mató a un hombre.

Jugaban a las cartas y él no tenía dinero, y hacía trampas hasta que se dieron cuenta y tuvo que huir, perseguido por todos, que le tiraban bolas de billar. Para defenderse, él cogió una bola negra y al primer tiro le dio a un hombre gordo un golpe en la cabeza.

Roberto les ayuda a relacionarse entre ellos y juegan a las cartas, jugándose el tabaco.

Hace además un juego de palabras con scream (gritar) y ice cream (helado) y hacen una especie de canción que recitan los tres hasta que por el escándalo acuden los guardias, mientras en las celdas de al lado siguen con la canción.

Un día, Roberto les cuenta que estando en el patio vio una forma de evadirse que vio en una película en Italia.

Un día van a sacar a Jack y a Zack al patio, pero no a él, que lleva cuatro días sin salir, consiguiendo a base que quejarse que el carcelero le deje salir.

Poco después los tres salen a las alcantarillas, y, una vez fuera se escuchan las sirenas, corriendo campo a través hasta acabar agotados.

Roberto está contento de haber escapado como en las películas americanas, aunque entonces empiezan a escuchar a los perros que les persiguen, por lo que deben continuar su huida, adentrándose en una zona pantanosa.

Para despistar a los perros, deben atravesar el río, aunque Roberto les dice que no sabe nadar, viendo con desesperación cómo sus dos compañeros escapan a nado.

Teme tanto a los perros como al agua y cuando escucha cómo estos se acercan, solo piensa en que espera que los controlen y no le muerdan, por lo que enseguida levanta los brazos y se da por rendido, siendo sorprendido por detrás, pero no por los policías, sino por Zack, que regresó a por él y le cruza.

Mientras descansan y Jack duerme, Zack le cuenta que por esa zona hay caimanes, serpientes de cascabel o de agua y hormigas rojas que se comen a una familia en media hora, haciendo que Roberto se asuste.

Deciden seguir luego su camino hasta el alba, descubriendo entonces Roberto que ha perdido su libreta de inglés, consiguiendo llegar a un refugio. Una casita de madera en la que no hay nada más que una vela y unas literas sin colchones, pareciéndoles estar de nuevo en su celda, aunque pueden descansar esa noche.

Jack dice que deberían ir a Mississippi, apuntando Roberto que él quiere ir a Texas, un país muy extraño que ha visto en muchas películas, aunque Jack dice que allí les detendrían.

Continúan su camino, esta vez en una barca que había en el refugio, debiendo ponerse Roberto un salvavidas ya que no sabe nadar, aunque no saben a dónde dirigirse, dándose cuenta después de estar horas remando, que están dando vueltas al mismo sitio, hasta que, de pronto la barca comienza a llenarse de agua y deben abandonarla antes de que acabe hundiéndose.

Sin saber qué camino tomar, se sientan, dándose cuenta después de un rato de que Roberto no está.

Hambrientos y cansados, Jack acusa a Zack de estarle llevando a propósito por mal camino, haciéndoles dar vueltas, diciéndole Zack que es cierto, que quieren agotarlo para acabar con él y cenarlo, empezando de nuevo a pelearse entre ellos.

Les separa Roberto, que llega en ese momento llevando un conejo que consiguió cazar para cenar.

Pero Jack y Zack están enfadadas y se marchan cada uno por su lado.

La debilidad les hace delirar a los tres, que hablan solos, aunque Roberto entretanto asa el conejo que cazó, viendo cómo al rato Jack y Zack regresan junto al fuego, pues tienen frío y comen el conejo pese a su mal sabor.

Al día siguiente reanudan la marcha hasta conseguir llegar a un camino que seguirán hasta llegar a un restaurante italiano, pensando al verlo que quizá sea un espejismo.

Envían a Roberto a investigar para que compruebe que no hay ningún agente, mientras ellos se ocultan esperando su noticia, viendo que no sale y tarda demasiado, por lo que, como tienen hambre y frío deciden acercarse al restaurante, viendo desde la ventana que Roberto está sentado en una mesa y una mujer con la que tontea, italiana como él, que le sirve comida.

Cuando entran, Roberto habla con la mujer, Nicoletta, con la que coincida en que a ninguno de los dos les gusta el cerdo, mirándose tras ello a los ojos muy cerca, invitándolos Roberto al verlos a sentarse a comer con él, diciéndoles que está enamorado de Nicoletta.

Ella les cuenta que su tío Luigi le dejó el bar, que había ganado a las cartas y se lo dejó para no volver a perderlo.

Les cuenta también que su novio la dejó el día de su cumpleaños y ese mismo día murió su tío Luigi y ella se fue de Italia.

Roberto les explica que ya hablaron de quedarse a vivir allí juntos para siempre y tener hijos, tras lo que se besan, brindando tras ello por Bob y por Nicoletta.

La chica les explica que están cerca de la frontera con Texas y carece de coche, llevándole un hombre cada semana lo que necesita del pueblo, pues él solo tiene una bicicleta.

Les deja ropa de su tío, aunque a Zack le queda grande y a Jack pequeña.

Roberto les propone quedarse allí unos días, pero dicen que es muy peligroso y deben marcharse, diciendo Zack que quiere ir a Los Angeles, diciendo Jack que entonces él irá hacia el este.

Roberto y Nicoletta bailan mientras ellos desayunan y los ven abrazarse y besarse.

Se despiden tras ello, indicándoles ella que si siguen la carretera llegarán a una bifurcación, yendo una carretera hacia el este y otra hacia el oeste.

Tras dejar el "Luigi's Tin Top", Jack y Zack caminan con su nueva ropa hasta llegar a la bifurcación, aunque no hay ninguna señal que les indique hacia dónde van cada uno de los caminos, intercambiándose la ropa antes de despedirse y desearse suerte, yendo cada uno de ellos por uno de los caminos, sin saber a dónde les llevarán.

Calificación: 3