¡Cásate conmigo!
Wedding Daze (2006) * USA
Duración: 92 min.
Música: Peter Nashel
Fotografía: Daniel J. Stoloff
Guion y Dirección: Michael Ian Black
Intérpretes: Jason Biggs (Anderson), Isla Fisher (Katie), Michael Weston (Ted), Ebon Moss-Bachrach (Matador), Joe Pantoliano (Smitty), Heather Goldenhersh (Jane), Joanna Gleason (Lois), Edward Herrmann (Lyle), Margo Martindale (Betsy), Mark Consuelos (Morty), Audra Blaser (Vanessa), Matt Malloy (Stuart).
Cuando Anderson decide declararse a Vanessa, su novia, no sabe que el hacerlo, disfrazado de Cupido, acabará por provocar su muerte debido a la impresión.
Pasará tras ello un año sin dejar de pensar en ella, hasta que Ted, su mejor amigo le pide que se abra.
Anderson, se burla de él, y, decide proponerle matrimonio en plan de broma a la primera mujer que aparece ante él, que no es otra que Katie, la camarera que les está sirviendo.
Al oír la proposición Katie recuerda que William, su novio hizo lo mismo unos días antes y ella no aceptó pese a que es un chico fantástico, al que su madre y su padrastro adoran.
Y de forma inesperada ella acepta su proposición sin que él sepa reaccionar, y, aunque ambos saben que era una broma deciden seguir adelante, yéndose ella a vivir a su casa, siendo ayudada en la mudanza por sus jefes, los antiguos artistas circenses Matador y Jane.
Al día siguiente ella se lo presenta a sus padres, que no sienten ninguna simpatía por él, pues adoraban a William, y así se lo hacen ver, como la madre de él hará lo propio, dejándole muy claro a Katie que preferían a Vanessa, cuya historia Katie ignoraba.
El que le ocultará la historia de Vanesa hace que la pareja discuta. Katie piensa que él está pirado, al seguir enamorado de una mujer muerta, mientras que a él ella le parece también una pirada por haber aceptado la proposición de matrimonio de un desconocido.
Eso supondrá la ruptura de la relación… aunque temporal, pues cuando ella regresa a recoger sus cosas, él le pide que no se vaya, pues le gusta, y, aunque ella está disgustada reconoce que él también le gusta.
Y entonces él tiene una idea: irán a casarse a la "Casa del Éxtasis Conyugal" en Atlantic City, el mismo lugar en que se casaron los padres de ella, que lo hicieron como ellos, sin casi conocerse, a pesar de que aquello no saliera bien, ya que su padre está encarcelado.
Pero no por mucho tiempo. Consigue robar las llaves de su carcelero y huye, y va a ver a su esposa, que de inmediato vuelve con él pese a afirmar que le odiaba, para acudir a la boda.
Anderson y Katie convencen a sus amigos para que los acompañen, debiendo Ted además robar uno de los coches de la empresa en que trabajaba para poder hacer el viaje.
En una parada que hacen en un área de servicio Anderson es abordado por William, que le da una paliza sin que Anderson sepa la razón, impidiendo la llegada de un policía que la cosa vaya a más.
Pero cuando se van a marchar chocan contra el coche del policía y son detenidos, descubriéndose que robaron un coche, coincidiendo en el calabozo con los padres de Katie, detenidos por robar un traje para la boda.
Y será la madre de Katie quien los libere tras hacerse con un arma, y llegarán a la "Casa del Éxtasis Conyugal", un antro, donde, antes de dar el sí Anderson recuerda de nuevo a Vanessa, que se le aparece y que le dice que antes de morir se enamoró de Morty, un camarero del restaurante que se suicidó después de la muerte de ella.
Terminada la boda, y gracias al localizador del coche del padrastro de Katie, se encuentran a la salida con la policía, y entre ellos William, enamorado de uno de los policías, que, tras felicitarlos y hacerles una foto recordatoria del evento los detienen.
Pasarán su luna de miel en la cárcel mientras Ted y Jane se unen a un circo.