Te cuento la película

Elle
Elle

Elle (2016) * Francia / Alemania / Bélgica

          También conocida como:
                    - "Elle: abuso y seducción" (Hispanoamérica)

Duración: 130 min.

Música: Anne Dudley

Fotografía: Stéphane Fontaine

Guion: David Birke (Novela: Philippe Djian)

Dirección:Paul Verhoeven

Intérpretes: Isabelle Huppert (Michèle Leblanc), Laurent Lafitte (Patrick), Anne Consigny (Anna), Charles Berling (Richard), Virginie Efira (Rebecca), Judith Magre (Irène), Christian Berkel (Robert), Jonas Bloquet (Vincent), Alice Isaaz (Josie), Vimala Pons (Hélène), Raphaël Lenglet (Ralph), Arthur Mazet (Kevin), Lucas Prisor (Kurt).

Se oyen los jadeos de una mujer, la rotura de algo y luego los de un hombre.

El hombre está violando a la mujer, Michèle Leblanc, habiendo varios objetos de cerámica rotos por el suelo.

Cuando el violador se marcha Michèle recoge los restos, incluida su ropa interior y los tira a la basura, tras lo cual se mete en el baño tras tirar también la ropa a la basura, surgiendo entre la espuma la sangre que sale de su vagina.

Cuando llega su hijo Vincent le dice que el moratón de su cara es que se cayó de la bici.

Vincent parece contento porque puede llegar a ser encargado en la hamburguesería en que trabaja y le lleva un regalo. Una foto enmarcada de él y de su novia embarazada.

Inmediatamente ella le pregunta cuánto necesita para su piso y él le dice que solo quiere que lo avale, no que le dé dinero, diciéndole que lo único que sabe de Josie es que se crio en una comunidad de memos que nunca se lavan. Corrigiéndole él y diciéndole que era un colectivo de artistas.

Michèle le propone darle tres meses del alquiler a cambio de que le enseñen el piso.

Cuando se va Vincent, busca un martillo y se acuesta con él tras mirar por la ventana.

Al día siguiente llama para que cambien todas las cerraduras de su casa.

Va luego al trabajo, asistiendo a la demo del juego de consola que están preparando en su compañía, quejándose de que los espasmos orgásmicos de la mujer atacada por un monstruo son muy flojos.

Se enfrenta a ella Kurt, el creador que se queja de que los mandos que tienen son tan malos que no pueden apenas jugar a la demo y le dice a Michèle que ella entiende del mundo editorial, pero no sabe evaluar la jugabilidad, que es lo importante, debiendo recordarle ella que la jefa es ella y que llevan ya 6 meses de retraso.

Se hace unos análisis para descartar haber contraído algún virus tras la violación.

Mientras come más tarde en un restaurante, ve sorprendida cómo de pronto una mujer le tira el contenido de su bandeja encima y le dice que son una escoria ella y su padre.

Va a visitar tras ello a su madre a la que encuentra en bata y junto a un joven en calzoncillos, diciéndole la madre que debería haber llamado antes, pues podría haberla pillado con un hombre "tomando café", preguntándole ella cuánto le paga, diciendo su madre que hace lo que desea y no se arrepiente de nada, mostrándose ella preocupada de que puedan quitarle algo.

Le pregunta tras ello si se ha hecho algo, diciendo su madre que solo un pequeño bótox.

Cuando se marcha el gigoló, Ralph, su madre le pregunta qué pensaría si vuelve a casarse, diciéndole Michèle que la mataría.

Cuando llega a su casa, ve a sus vecinos de enfrente, un joven matrimonio, bajando el árbol de Navidad, entregándole Rebecca, la mujer, un panfleto que están repartiendo entre los vecinos por los problemas con la basura en el barrio.

Al entrar ve a su gato maullando y se inquieta, pues recuerda lo ocurrido el día anterior.

Trataba entonces de cerrar la puerta del jardín, que no encaja bien e hizo pasar al gato que estaba fuera, no pudiendo cerrar la puerta al aparecer un hombre con pasamontañas y guantes que se lo impidió.

Ella trató de huir, aunque él la alcanza y la hace caer, y tratando de aferrarse a algo cogió el mantel, haciendo caer su juego de café.

Trató de defenderse de su agresor a patadas hasta que él la abofeteó y la violó.

Ahora ella le echa en cara a su gato que no hiciera nada por defenderla.

Recibe entonces un mensaje desde un número desconocido que le dice que la encuentra una mujer muy atractiva para su edad.

Decide comprarse un spray de gas pimienta para defenderse.

Por la noche va a cenar a un restaurante donde ha quedado con su ex marido, Richard, destrozándole la parte delantera del coche a propósito al aparcar y nada más entrar este le pregunta si es cierto que va ayudar a Vincent con el alquiler, diciéndole que no puede contar con él, que no tiene dinero y cree además que tiene que espabilarse y madurar, aunque Michèle cree que Josie no desea madurar, señalando Richard que debe ser de ese tipo de mujeres que son muy buenas en la cama, preguntando ella qué significa ser buena en la cama, tras lo que le pregunta si piensa que ella lo tiene muy estrecho para su edad.

Los interrumpe la llegada de Anna, su socia, y de Robert, su marido, que empiezan hablando de un nuevo proyecto, aunque ella les interrumpe para contarles que la violaron, y fue a que la revisaran médicamente, pero que no lo denunció a la policía, ni desea hacerlo, no haciendo caso a sus amigos cuando le insisten en que lo haga, ni luego, a Richard, cuando salen ya solos.

Le dice tras ello que habló de su proyecto a los inversores, pero que no están interesados y le pide que siga con su novela, ya que él es escritor.

Michèle acude a buscar a su hijo al Quick Team, la hamburguesería en que trabaja y van luego a ver el piso que va alquilar y donde les espera ya la novia haciendo mediciones para los muebles.

Vincent le dice a su madre que les vendría mejor una televisión de 50 pulgadas que el microondas que le prometió, preguntando ella si no les será más útil un horno que una tele, diciendo él que la cocina está muy bien equipada.

Ella se da cuenta de que el apartamento es muy grande, confirmándole Vincent que no es apartamento del que le habló, sino que es más grande y 250 Euros más caro, pues en el otro no les cabía ni la cuna.

Ella les advierte que el nacimiento de un niño solo trae sufrimiento.

Josie le dice al ver sus reticencias que si no quiere ayudarlos que no lo haga, preguntando ella cómo podrán apañarse sin su ayuda, diciéndole Josie que no es asunto ella, a lo que Michèle le replica que ya que necesitan su dinero debería tratarla con más respeto, asegurando Josie que a ella su dinero no le importa y que no le ha pedido nada, reprochándole a Vincent que se quede parado sin decir nada, tras lo que se marcha.

Michèle le dice a su hijo que su novia está loca.

Cuando llega al trabajo va Robert a hablar con ella, contándole que Anna está en Angulema, entrando con ella en el despacho y cerrando todas las persianas, recordándole ella que ha pasado por una experiencia traumática, pese a lo cual él se baja los pantalones diciéndole que ella dejó claro que quería seguir con su vida normal, haciendo que ella lo masturbe.

Recibe tras ello un nuevo mensaje del desconocido que le señala que le gusta mucho la blusa que lleva de color crema y que no se la manchará de semen, asustándose mucho, pues la oficina está ya vacía.

Sale con su madre, a la que le pregunta si ha tenido algún percance, contándole esta que en una ocasión le tiraron una pizza y a veces nota que la miran mal en el mercado, preguntándose Michèle si no está volviendo a pasar, contándole su madre que el sábado anterior repitieron el programa en que hablaban de su padre y que la semana siguiente comparecerá ante el juez para pedir la libertad condicional.

Michèle asegura que no desea volverlo a ver nunca y que afortunadamente no saldrá, pese a lo cual su madre insiste en mostrarle una foto suya en la que se le ve ya como un anciano, recordándole su madre que ella además del monstruo, conoce al hombre.

De pronto vuelve a recordar el suceso de su violación, aunque esta vez lo varía en su cabeza, viéndose a sí misma dominando al violador y golpeándolo hasta acabar con él.

De pronto un pájaro choca contra su ventana y ve como Marty, su gato se lanza a comerlo, arrebatándoselo ella que llama a un veterinario que le dice que no se ocupan de los pájaros silvestres y que no sabrían tratarlo.

Ve el programa en que hablaron de los sucesos ocurridos 39 años en Nantes y protagonizados por su padre Georges Leblanc, "Los asesinatos de la calle Legave" y donde cuentan que en 1976 la atención de toda Francia estaba en aquella calle, preguntándose qué pudo llevar a aquel hombre a cometer aquellos monstruosos actos y qué papel jugaba su hija Michèle, que tenía entonces 10 años.

Cuando sale para tirar el pájaro a la basura coincide con Patrick, su vecino, viendo cómo un coche para frente a su puerta tras dar la vuelta al final de la calle, observando luego desde casa que sigue allí parado, por lo que, tras coger el spray y un hacha sale por la parte trasera, sorprendiendo así al conductor, al que, tras romperle el cristal con el hacha, lo rocía con el spray, viendo entonces que se trata de Richard, por lo que debe lavar sus ojos y darle una crema, diciéndole él que estaba preocupado por ella tras la violación.

Ella dice que no reconoció el coche, diciéndole él que se lo prestó una amiga, Hélène, porque el suyo tuvo que llevarlo al taller por el parachoques.

Reconoce que Hélène es una alumna que está haciendo el doctorado, aunque no con él, y que se lo ganó cuando le habló de su libro y de cómo le había marcado, no entendiendo los celos de Michèle, que le dice que se preocupa porque quienes han leído "El Segundo Sexo" se lo comerán vivo y luego lo escupirán.

Al día siguiente Michèle habla por teléfono con Vincent del asunto, reconociendo este que ya sabía que su padre salía con otra mujer, pues la semana anterior comieron juntos, recriminándole Michèle que no se lo contara, contándole él que es profesora de yoga, escuchando mientras hablan cómo Josie le recrimina que no la ayude.

De pronto ve cómo en su ordenador, y en el de todos los trabajadores se proyecta un trozo de la demo del juego donde la heroína es violada por uno de los monstruos, habiendo sustituido alguien la cara de la heroína por la suya, viendo cómo todos sus trabajadores ríen al verlo.

Le dice a Ana que sospecha que se trata del hombre que la violó, y sabe que es alguien de la oficina, pues el correo salió de allí, pese a lo cual sigue sin querer avisar a la policía o a los periodistas, pues pueden remover el pasado que ha luchado por enterrar.

Llama a uno de sus colaboradores, Kevin, que le dice que no necesariamente es alguien de allí, pues en junio piratearon su servidor.

Se presenta en el gimnasio donde trabaja Hélène para disculparse por los destrozos de su coche y aprovecha para invitarla a una fiesta que dará en Navidad.

A la salida recibe una llamada de Vincent y acude al hospital, pues parece que Josie tuvo un desprendimiento de placenta y tendrán que provocarle el parto, coincidiendo en el hospital con Richard, que le pregunta por la invitación para la cena, echándole Michèle en cara que incumpliera las normas.

Richard le recuerda que ella salió antes con un violinista, diciéndole ella que ya era padre, y sin embargo él sale con una mujer que está aún en edad de engendrar y piensa que deberían seguir juntos, señalando Richard que fue ella la que le dejó, recordándole ella que él le pegó, diciendo él que si de algo se arrepiente en la vida es de aquello.

Vincent les avisa entonces de que ya nació el pequeño, por lo que corren a verlo, dándose cuenta de que el pequeño es mulato, no pudiendo Michèle evitar mirar a Omar, el amigo de Vincent mientras dice que tendrán que hacer la prueba de ADN.

Pese a ello, Vincent se muestra feliz frente a la incredulidad de su madre, que observa, cuando Josie da de mamar al bebé que lleva tatuado en el pecho junto a varios corazones el nombre de Eric.

Cuando llega Anna abraza a Vincent mientras Michèle se va de la habitación y sale para fumar fuera, contándole a la enfermera que atiende a su nuera que ella tuvo a su hijo en el mismo hospital la misma noche que Anna al suyo y que fue allí donde se conocieron.

Pero el hijo de Anna nació muerto y le pidió darle el pecho a Vincent, preguntándose ella si aquello no creó una especie de impronta, pues Anna y Vincent han estado muy unidos desde entonces.

Cuando llega a su casa por la noche ve que hay un coche policial, contándole Rebecca, su vecina, que Patrick la acompañará hasta su casa, pues hay un intruso en el barrio con el que se peleó Patrick, contándole este que lo vio agachado entre los arbustos mirando su casa y llevaba un pasamontañas, y aunque ella asegura que no es necesario que la acompañen él lo hace y revisa la casa sin ver nada extraño.

Antes de que Patrick se marche le cuenta que es abuela, dándole él la enhorabuena.

Le pide en el trabajo a Kevin que le enseñe a disparar, yendo con él a una clase de tiro, tras lo que le pide que le ayude a descubrir al autor de la animación que recibió por correo, aunque para ello deba piratear los ordenadores de todos los empleados hombres, ofreciéndole por su trabajo 10.000 Euros.

Desde su ventana observa a sus vecinos mientras montan un Belén con figuras grandes. Coge tras ello los prismáticos y comienza a masturbarse mientras observa a Patrick.

Baja luego a su casa e invita a la pareja a su fiesta de Navidad.

El día de esta acuden Vincent y Josie, Irène, su madre con Ralph, su novio, Anna y Robert, que la sigue hasta la cocina y le dice que no podrá evitarlo toda la noche.

Durante la cena Patrick le dice que ellos no salen mucho y lo lamenta por Rebecca, que es muy sociable, poniendo su mano sobre la de Michèle que se sorprende.

Poco después y con retraso, llega Hélène, sorprendiéndolos Rebecca al pedir que le permitan bendecir la mesa.

Anna le pregunta a qué se dedica, contando Patrick que es bróker.

Mientras cenan Michèle se descalza y acerca su pie a la bragueta de Patrick, en principio sorprendido, pero que no dice nada.

En medio de la cena se levanta Irène para anunciar que se va a casar con Ralph, dándoles todos la enhorabuena, excepto Michèle, que se ríe y le pregunta cómo puede ser tan grotesca.

Terminada la cena, Richard y Hélène se disponen a marcharse mientras Rebecca pide permiso para poner la misa, pues son casi las 12.

Robert le pregunta a Michèle si el tonteo con el banquero fue para provocar sus celos.

Mientras Rebecca e Irène ven la misa, los demás juegan al Scrabble.

Michèle se sienta junto a Patrick y le cuenta que su padre le hacía siempre una cruz en la frente cuando salía hacia el colegio y se lo hacía también al resto de los niños del barrio, por lo que algunos padres se lo prohibieron, algo que él no se tomó bien y fue puerta por puerta y entró en todas las casas del barrio con una escopeta, un mazo de carnicero y unas tijeras de cocina, señalando Patrick haber oído algo, diciendo ella que debió oír hablar de las 27 víctimas humanas, pero no de los animales. 6 perros y 2 gatos

Ella estaba haciendo los deberes cuando llegó a casa cubierto de sangre y decidió quemar todas las cosas de casa mientras su madre estaba trabajando como enfermera.

Ella le ayudó a hacer el fuego y quemaron cortinas, mesas, alfombras y moquetas

Y cuando iban a echar la ropa al fuego llegó la policía y alguien la fotografió, quedando esa fotografía en el recuerdo de la gente.

Su madre le echa en cara lo cruel que fue con ella durante la cena y nada más alejarse de ella cae al suelo, lo que Michèle piensa es solo una actuación.

Pero poco después va con ella camino del hospital en una ambulancia, pidiéndole durante el trayecto que vaya a ver a su padre.

Tras ser examinada le informan que sufrió una apoplejía y aunque disminuyeron la tensión arterial en el cerebro no respondió al tratamiento.

Pese a todo, Michèle le pregunta a la doctora si no podría estar fingiendo, diciéndole esta no solo que es real, sino que además hay muchas probabilidades de que no vuelva a despertar.

Fuera la espera Anna que la lleva a su casa, durmiendo con ella mientras le pide a Robert que duerma en la habitación de invitados.

Antes de acostarse hablan de Richard y su nueva novia y luego, ya juntas en la cama recuerdan Cassis, donde intentaron tener relaciones, pero no pudieron, pues no paraban de reírse.

A la mañana siguiente la despiertan unas caricias sobre sus piernas, viendo que se trata de Robert, que le dice que Anna se fue a la oficina, diciéndole ella que deben dejarlo, pues la situación es ridícula e intolerable.

Él le pide que le diga que ya no lo desea, diciéndole ella que no es tan sencillo, pero está cansada de la situación y de las mentiras.

Luego asegura ante su madre que no va a ir a ver a su padre pese a que sea el último deseo de una moribunda, y mientras está con ella y sin que se dé cuenta su madre tiene una parada cardio-respiratoria, no surtiendo efecto ninguna de las maniobras médicas.

Regresa a su casa y observa que hay luz, por lo que prepara el gas pimienta, viendo al subir a su habitación la cama deshecha y el ordenador encendido con una nota que le dice, "Lo siento, no he podido contenerme", viendo manchas de semen en sus sábanas.

Unos días después acude con Richard, Vincent, Josie, Anna, Robert y Ralph a lanzar las cenizas de su madre, aunque no ve ningún lugar que pudiera haber significado algo para ella.

De pronto Josie comienza a insultar a Vincent porque se le olvidó coger algo del bebé, por lo que se marcha enfadada, justificándola Vincent diciendo que es una depresión post parto, aprovechando su madre el momento para recordarle que el bebé no es hijo suyo, llamándola Vincent zorra tras escucharla, marchándose también, lanzando las cenizas en el lugar donde estaban pese a no significar nada.

Una tarde se levanta un fuerte temporal y las hojas de las ventanas de Michèle empiezan a batir, llamando alguien a su puerta.

Ve que se trata de Patrick, que dice ha ido a ayudarla para evitar daños por la tormenta, ya que tiene una veintena de ventanas en la casa, que empiezan a cerrar entre los dos con gran dificultad debido a la furia del viento, aprovechando él tras ayudarle a cerrar una de ella para abrazarla y tocarla, y, aunque ella se muestra totalmente entregada él se excusa por lo que hizo y se marcha.

Al día siguiente en el trabajo habla con Kevin, que le dice encontró algo en el servidor de Kurt, unas imágenes de una chica pisando bichos, algo que ella considera retorcido, pero no una prueba de nada, y luego, por la tarde, y cuando ya todos se marcharon investiga el ordenador del propio Kevin, donde descubre que guarda fotografías suyas, tanto de los sucesos de su niñez como actuales, comprobando que fue él quien hizo el montaje con el juego.

Cuando llega este se da cuenta de que ha sido descubierto y le explica que hizo el montaje para él mismo, pero un compañero se lo robó del ordenador y lo enseñó a todos.

Le dice que cuando lo creó pensó en crear un juego partiendo de fotos de crímenes, pero se descontroló.

Michèle le pide que le enseñe el pene, diciéndole que si lo hace quizá no lo despida y al verlo desnudo le dice que creía que era judío, pues al hombre al que busca está circuncidado, y aunque no lo despide le dice que no le dará los 10.000 y le pide que borre el video.

Cuando llega a su casa encuentra un paquete en su puerta con una sillita para el bebé de Vincent y mientras la observa es sorprendida por la espalda nuevamente por el violador, que la golpea y la derriba y se dispone a violarla de nuevo cuando ella tira de las cintas de la sillita del niño que le cae al agresor en la cabeza.

Pero él la golpea duramente y prosigue en su intento de violarla, consiguiendo ella coger las tijeras con las que atraviesa la mano de su agresor, al que, mientras se retuerce por el dolor ella le quita el pasamontañas para descubrir que se trata de Patrick, al que patea mientras amenazándolo con las tijeras le pide que se vaya, consiguiéndolo.

A la mañana siguiente, cuando sale a recoger el correo ve que Patrick sale para el trabajo y sube al coche tan elegante como siempre.

Ve en televisión la noticia de que denegaron la libertad provisional a su padre, que a sus 76 años no podrá volver a pedirla hasta 10 años más tarde, diciendo ella "¡que se joda!".

Pese a todo acude a prisión, diciéndole al director adjunto que es quien la recibe, cuando llega que ha ido para escupirle a la cara porque la ha controlado demasiado.

Pero el funcionario le informa entonces que su padre ha fallecido, contándole que lo encontraron muerto en su celda ahogado con una sábana, algo que debió ocurrir entre las 7 de la tarde y las 7 de la mañana, confirmándole que le anunciaron que su hija lo iba a ir a visitar poco antes de las 7 de la tarde.

Le informan que su madre pidió que lo incineraran y lo encerraran junto a ella, y le muestran su cadáver, al que le dice que ha acabado con él al ir a visitarlo.

Mientras regresa, atiende con el manos libres a una periodista, a la que le pregunta cómo conoció su teléfono, cuando un ciervo salta delante de su coche, por lo que pierde el control y se sale de la carretera chocando contra un árbol.

No pudiendo apenas moverse llama a Anna y a Richard, aunque ambos aparecen ocupados, por lo que llama al teléfono del panfleto que le entregó Rebecca por el tema de las basuras, apareciendo poco después a auxiliarla Patrick, que la saca por la ventanilla, al estar bloqueada la puerta y la lleva a su casa, donde le desinfecta la pierna herida y le aconseja que vaya a que le miren un esguince.

Mientras la cura, ella le pregunta si le gustó y por qué lo hizo, respondiéndole él avergonzado, antes de marcharse, que lo necesitaba.

Acude al piso de su madre, donde encuentra a Ralph medio desnudo, que le pide que deje de ir sin avisar y sin llamar por mucho que sea la titular del piso, pues su madre le permitió estar allí, advirtiéndole ella que lo ha puesto a la venta, mientras sale una joven desnuda a preguntar qué pasa.

Ralph le dice que se enteró de la muerte de su padre y está contento de que muriera y de haberse follado a su mujer.

Recibe a la salida una llamada de Robert, que le dice que Anna no estará esa tarde, y aunque ella le cuenta lo del esguince a él no le importa, ya que, le dice, no van a esquiar.

Vuelven a acostarse, haciéndose ella la muerta mientras lo hacen, algo que a él le encantó, aunque luego le dice que ahora ya pueden ser amigos sin acostarse.

Al volver a su casa encuentra allí a Vincent que dice que Josie le echó de casa por haber dejado el trabajo, lo que hizo porque se le rompió el coche, y le hubiera llevado una hora ir y otra volver al trabajo.

De pronto Michèle se da cuenta de que se ha llevado con él al bebé, pues dice que Josie quería irse a América y llevárselo, pidiéndole Michèle que lo devuelva, pues no están casados y pueden acusarlo de secuestro, algo que no entiende él, pues dice es su hijo.

Llega entonces Josie muy enfadada, y aunque él trata de evitarlo ella se lleva al niño.

Un día acude al supermercado con Vincent, encontrándose allí con Patrick que les dice que Anna se ha ido de viaje y le ha dejado mucha lasaña, por lo que los invita a cenar.

Durante la cena Patrick les cuenta que Rebecca se fue con sus padres a Santiago de Compostela a ver al Papa.

Vincent bebe demasiado y se queda dormido

Ella nota el suelo caliente y él le cuenta que instaló una caldera en el sótano que le invita a ir a ver, y una vez abajo él la golpea y vuelve a tirarla, aunque cuando va a volver a pegarle ella le dice que lo haga, diciendo él que si no lo hace le será imposible, pues tiene que ser como antes, por lo que ella lo abofetea, siendo a su vez abofeteada por él que vuelve así a excitarse y a hacer el amor, continuando ella durante un rato gimiendo tras terminar él.

En la empresa terminan el juego, proponiéndole Michèle a Anna que organice Vincent la fiesta de presentación, lo que le parece bien, mostrándose esta preocupada, confesándole a Michèle que está así porque cree que Robert está acostándose con otra mujer por el olor a gel barato de hotel que le notó, y porque además olió su ropa interior.

Finalmente se celebra la fiesta de presentación.

A la misma acude Richard solo, confesándole a Michèle que rompió con Hélène tras preguntarle cuál de sus libros prefería, respondiendo ella que "El perfume del álamo", un libro que no es suyo, sino de otro escritor con su mismo apellido.

Tras los brindis le presenta a Kurt para que le hable de su idea sobre un videojuego para ver si sería viable.

Ve a Robert diciéndole a Anna que deberían irse, pues lo pasarían mejor en la cama que allí, pensando que lo hace por despecho al ver la atención que le presta a Patrick.

Se acerca entonces a Anna, que parece muy contenta con el resultado de la fiesta y le cuenta que es ella la amante de Robert, aunque le dice que aunque llevaban unos 6 meses, ya se terminó todo, asegurando Anna que no se había dado cuenta de nada.

Al ver a Anna abatida, Robert se acerca a Michèle y le pregunta qué ha hecho, respondiendo ella que dejar de mentir.

Abandona tras ello la fiesta, acompañada por Patrick, dejando atrás a Anna insultando a su marido y pidiéndole que la deje.

Durante el trayecto hacia su casa, le dice a Patrick que lo que ocurre entre ellos es nocivo, como una enfermedad y le dice que va a hacer lo que debió a hacer desde el principio, pues no puede permitir que se libre de todo lo que le hizo, y debe hacerlo no solo por ella, sino por su mujer y por otras mujeres que pudieron ser sus víctimas antes o pudieran serlo después, indicando que lo denunciará a la policía.

Él no dice nada, pero cuando ella se baja del coche se lanza contra ella, sin que esta se inmute, aunque al llegar ante ella la esquiva y no le hace nada.

Un minuto después, y ya en casa se ve sorprendida por Patrick, de nuevo con el pasamontañas, que se lanza contra ella, que no se inmuta hasta que él le arranca el vestido y comienza a golpearla con saña.

Pero mientras lo hace aparece Vincent que lo golpea con un palo hasta hacer que empiece a sangrar su cabeza.

Patrick se quita el pasamontañas y pregunta por qué antes de caer de nuevo al suelo.

Michèle debe consolar a Vincent, asustado por lo que hizo.

Poco después acude la policía a su casa y le preguntan si su relación con su vecino estaba tomando un matiz personal, ya que la acompañó hasta la fiesta, asegurando que cuando apareció enmascarado no se le pasó por la cabeza que podría ser él.

Mientras unos obreros pintan una habitación en su casa observa los camiones de la mudanza que van a llevarse las cosas de Rebecca, por lo que baja y le dice que siente mucho por lo que ha pasado, afirmando ella que por suerte le queda la fe.

Le dice también que Patrick era bueno, pero tenía un alma atormentada y le dice que se alegra de que pudiera darle lo que necesitaba durante algún tiempo.

Llegan entonces Vincent y Josie a bordo del descapotable que acaban de comprarse, mostrándose muy contentos. Josie y Michèle parecen además ahora muy amigas.

Un día acude al cementerio a colocar unas rosas junto a la tumba de su madre, habiendo pintadas en el nicho de al lado, el de su padre, que ni siquiera tiene lápida.

Estando allí, aparece Anna, que le cuenta que ha echado a Robert, que desde entonces se pasa el día borracho, preguntándole a Michèle que vio en él, señalando ella que sucedió sin más porque tenía ganas de hacer el amor, señalando Anna que eso no es una excusa, pues es pésimo en la cama.

Mientras se marchan, Anna le dice que solo quedan ellas dos y que está muy sola en esa casa tan grande y que va a venderla, preguntándole a Michèle si podría irse a vivir con ella durante un tiempo.

Calificación: 3