Te cuento la película

La noche de Halloween
La noche de Halloween

Halloween (2018) * USA

          También conocida como:
                    - "Halloween" (Hispanoamérica)

Duración: 109 Min.

Música: John Carpenter, Cody Carpenter, Daniel A. Davies

Fotografía: Michael Simmonds

Guion: David Gordon Green, Danny McBride, Jeff Fradley

Dirección: David Gordon Green

Intérpretes: Jamie Lee Curtis (Laurie Strode), Judy Greer (Karen Nelson), Andi Matichak (Allyson), Will Patton (Frank Hawkins), Haluk Bilginer (Dr. Ranbir Sartain), Nick Castle y James Jude Courtney (Michael Myers), Virginia Gardner (Vicky), Toby Huss (Ray Nelson), Jefferson Hall (Aaron Korey), Rhian Rees (Dana Haines), Miles Robbins (Dave), Dylan Arnold (Cameron), Drew Scheid (Oscar), Omar J. Dorsey (Sheriff Barker).

Dos periodistas, Aaron Korey y Dana Haines, llegan al centro de rehabilitación de Smith Grove esperando poder ver a un paciente, Michael Myers, que lleva encerrado 40 años, no habiendo pronunciado durante ese tiempo ni una sola palabra.

Los recibe el doctor Ranbir Sartain, su psiquiatra, al que agradecen que les haya permitido haber podido hacer su reportaje antes del traslado a un nuevo centro, pues, señala, parece que el gobierno perdió ya su interés.

El doctor, alumno del Dr. Loomis, primer psiquiatra del asesino, reconoce que Michael es la obsesión de su vida y que ha estudiado cada uno de los archivos del caso, habiendo presionado para que se lo asignaran a él cuando falleció Loomis, diciendo que lo vieron más de 50 psiquiatras clínicos, teniendo cada uno de ellos una opinión distinta, pues solo Loomis lo vio en libertad y concluyó que era el mal en estado puro.

Aunque permanece sin moverse, con las manos encadenadas al suelo, Sartain les dice que les ha visto, aunque no se inmuta.

Aaron le dice a Myers que lleva años investigando su caso y quiere saber más sobre aquella noche y los implicados y si piensa en ellos o se siente culpable de sus muertes, mostrándole un objeto que un amigo de la fiscalía le prestó, su máscara, pensando que reaccionará ante esta, cosa que no consigue, aunque sí lo hacen el resto de los enfermos, que comienzan a gritar y aullar como locos.

Haddonfield, Illinois

En el coche Aaron dicta sus conclusiones tras haber podido examinar al "animal" en cautiverio sin poder haber logrado reacción alguna en él, yendo a tratar de entrevistar a su equivalente, preguntándose si es posible que un monstruo haya creado al otro, pues, pese a haber unos barrotes y alambres de espino entre ellos, las líneas metafísicas son muy delgadas, pues ambos viven aislados y encadenados por su miedo y su odio mutuo.

Piensa que la única posibilidad de rehabilitarlos sea la confrontación.

Llegan, tras atravesar el bosque a una propiedad cerrada por una valla de alambre, la casa de Laurie Strode, que se niega a verlos pese a que le dicen que han viajado desde muy lejos, lo que no surte efecto, abriéndoles solo cuando Dana le ofrece 3.000 dólares.

Observan que la casa está rodeada de cámaras, y, cuando llegan ven cómo se abren varios candados y cierres para aparecer frente a una puerta metálica también cerrada que finalmente accede a abrirles.

Le explican que son periodistas de investigación y que les gusta estudiar los asuntos desde otra perspectiva y creen que la gente puede aprender mucho del terror que ella experimentó, y desean descifran la mente de Michael Myers, y lo que le llevó a matar a su hermana a los 6 años y a ir luego a por ella.

Están interesados también en cómo ha influido en ella aquel suceso, pues están al tanto de que tuvo dos matrimonios fracasados y una relación inestable con su hija y su nieta, pues A ella le quitaron a la primera con 12 años al no considerarla apta como madre, preguntándole Dana cuánto tardó en recuperar la custodia, diciendo que no lo hizo y cree que lo saben.

Ella está al tanto de que van a trasladar a Myers al día siguiente, pero ella no cree que sea necesario entender a Myers, pues mató a 5 personas.

Le cuentan que vieron a Michael, le enseñaron la máscara y no reaccionó, pero cree que con ella probablemente sí hablaría, y les gustaría que fuera con ellos y se vieran cara a cara, pudiendo así decirle todo lo que ha callado durante todo ese tiempo, aunque en ese momento ella les pide que le paguen y se marchen.

Allyson consiguió entrar en la National Honor Society y por eso, su madre, Karen, de dice que está muy orgullosa y que cambió su turno para poder ir esa noche con ellos y conocer a Cameron, recordando Ray, el padre, que su familia tiene una reputación.

Allyson le pregunta si invitó a su abuela para lo de la noche, diciéndole su madre que lo hizo, pero que no puede ir, pues es agorafóbica.

Pero luego, cuando va con su amiga Vicky hacia el instituto le dice que su madre la ha mentido y sabe que no llegó a invitar a su abuela ni la llamó, pues lo hizo ella y lo sabe.

Vicky piensa que si fuera ella su abuela tampoco celebraría Halloween, diciendo Allyson que su abuela no habla de otra cosa que no sea lo que pasó aquel Halloween debido a su trauma.

Ya en el instituto la aborda Cameron y le pregunta si tiene preparado ya el disfraz del día siguiente, pues irán de Bonnie y Clyde, diciendo ella que está pensando más en lo de esa noche y se besan.

Mientras está en clase ve que su abuela está fuera, y cuando sale le regala los 3.000 dólares que consiguió con la entrevista y le dice que puede usarlos para lo que quiera, aunque ella le dice que no puede aceptarlo, diciendo que lo guardará para la universidad, aunque su abuela le dice que viaje un poco y se vaya a México, animándola Allyson a que viaje ella, pues su obsesión por el hombre del saco le hizo perder a su familia, por lo que debe que se despida de Myers y lo supere.

Pero Laurie no piensa olvidarse y sigue practicando el tiro cada día en su jardín contra un montón de maniquíes.

Dana escucha las cintas grabadas por Loomis en 1979 en las que sugiere la eliminación de Myers, pues, asegura, no se gana nada dejando que el mal siga vivo.

Esa noche se produce el cambio de Myers, decidiendo Sartain acompañarlo, pues es su paciente hasta que se haga cargo de él el nuevo doctor.

Por su parte Laurie, muy nerviosa asiste desde su coche a ese momento.

En la cena, Allyson presenta a sus padres a su novio, Cameron, contándoles que al día siguiente acudirán a un baile del instituto disfrazados de Bonnie y Clyde.

Allyson vuelve a preguntarle a su madre si habló con la abuela, diciéndole que sí, que pasó por su despacho y hablaron.

Aparece entonces Laurie que bebe de la copa de su yerno y se muestra muy nerviosa, contándoles que fue a ver el traslado de Myers porque quería matarlo.

Karen le dice que le prometió que intentaría dejar atrás el pasado, aunque ella le dice que no puede y se marcha, saliendo Allyson tras ella para consolarla.

Su madre le dice luego que le alegra que lo viera, pues su infancia la pasó en una jaula, aprendió a disparar a los 8 años y tenía pesadillas con el sótano del que la sacaron los de servicios sociales a los 12 años, habiéndose pasado el resto de su vida intentando olvidar la paranoia que le generó.

Un muchacho sale de caza con su padre, lamentando que por ir con él se ha perdido su clase de danza, que le gusta más, observando, mientras hablan, que hay un tipo parado frente a ellos con una bata blanca, y cerca un furgón policial volcado, decidiendo salir el padre para ver si hay heridos mientras le pide a su hijo que llame a la policía.

El muchacho observa cómo los que viajaban en el autobús vagan por la carretera sin rumbo, decidiendo salir del coche, aunque con su escopeta para ver dónde están y contárselo a la policía, caminando asustado hasta el furgón diciéndole un hombre que huya, aunque él le dice que debe buscar a su padre, que no le contesta.

Sube por ello al autobús, donde el Doctor Sartain le asusta, por lo que le dispara accidentalmente, tras lo que regresa, asustado al coche, que trata de arrancar, sin darse cuenta de que hay alguien en la parte de atrás, uno de los ocupantes del furgón, Myers, que le rompe el cuello.

El oficial Hawkins, dependiente del sheriff del condado de Warren recibe el aviso del accidente y sale hacia el lugar, pidiendo refuerzos al llegar al ver que hay un agente herido y varios muertos, entre ellos el cazador, encontrando en el autobús a Sartain, herido, que le dice que escapó, aunque no acierta a decir quién.

31 de octubre

Aaron y Dana están acuden al cementerio de Haddonfield donde una guía les muestra la tumba de Judith Myers, la hermana de Michael y su primera víctima, que era una adolescente que estaba peinándose cuando su hermano, con solo 6 años comenzó a cortar la base de su cráneo con un cuchillo, dañándole la médula espinal, y, aunque trató de defenderse, él la siguió apuñalando en los nervios y arterias de sus palmas dándole tres puñaladas más en el esternón y penetrando en su corazón.

Los periodistas no ven cómo les observa alguien oculto tras uno de los árboles.

En el hospital siguen tratando de identificar a los pacientes que recuperaron del accidente. A dos de ellos los encontraron en la biblioteca pública y otros tres perseguían mariposas en un mercadillo, ignorando qué ocurrió realmente.

Hawkins le señala al sheriff, mientras observa la lista de los afectados, que la mayoría son delincuentes menores enfermos mentales, pero destaca uno, el A- 22-0-1, Michael Myers, recordando las canguros asesinadas en 1978. Justo 40 años antes.

Aaron y Dana paran en una gasolinera para repostar, guardando en el maletero todo el dossier del caso, que llevan en una caja, junto con la máscara de Myers.

Dana aprovecha para ir al servicio, en la parte trasera de la gasolinera, mientras Aaron reposta, escuchando, mientras está dentro, a alguien que entra ruidosamente, y trata de abrir la puerta, diciendo ella que está ocupado.

Aaron acude a pagar el repostaje y observa que alguien asesinó al cobrador, entrando luego en la parte de atrás, al taller, donde ve que hay otra persona asesinada.

En el baño, Dana observa cómo se asoma una mano por encima de su puerta que deja caer un puñado de dientes aún sangrantes, por lo que grita asustada y trata de huir reptando hacia los baños contiguos, sin que le sirva de nada, pues Myers la coge por las piernas, gritando ella tratando de que alguien acuda a ayudarla.

Aparece entonces Aaron con una barra metálica con la que golpea al asesino, que no parece inmutarse, cogiéndolo a él y golpeando repetidamente su cabeza contra las paredes hasta su muerte.

Dana coge la barra, pero es incapaz de hacer nada con ella, cogiéndola Myers del cuello que aprieta hasta ahogarla.

Va luego hasta su coche, y recupera la máscara del maletero y se la coloca.

Laurie escucha en televisión la noticia del accidente, decidiendo cerrarlo todo, comprobando que la entrada al búnker que construyó bajo la cocina funciona.

Cuando Karen llega a su casa escucha ruidos extraños, apareciendo de repente Laurie con una pistola Laurie simulando dispararle, y diciéndole que la ha sorprendido y está muerta, haciéndoles ver que no tienen ningún sistema de seguridad en su casa y por eso pudo entrar sin problemas, por lo que les pide que vayan a su casa mientras ella sale a cazar a Myers.

Pero Karen rechaza la oferta. Le dice que el mundo es un lugar lleno de amor y comprensión y no va a dejar que sus peroratas la confundan, rechazando también la pistola que le quiere dar su madre.

Mientras investigan los asesinatos de la gasolinera, Hawkins observa entre el público a Laurie, recordándole a su jefe que él estaba allí aquella noche y que su prioridad debe ser darle caza.

Esa noche Myers vaga por las calles llenas de niños y petardos con su máscara, entrando en un garaje donde se hace con un martillo con el que entra en la casa, y acabando a golpes con una mujer, cogiendo tras ello un cuchillo de su cocina.

Escucha entonces el llanto de un bebé y se acerca con el cuchillo a la cuna, aunque no se detiene y regresa a la calle, observando cómo los niños corretean disfrazados.

Entra tras ello en otra vivienda, totalmente adornada con calabazas y donde una mujer habla por teléfono y asegura que cerrará las puertas con llave, aunque mientras cierra las ventanas es sorprendida por detrás por Myers, que, de forma inmisericorde le clava el cuchillo por detrás del cuello.

Allyson y sus amigos, se divierten bailando en la fiesta del instituto, ella disfrazada de Clyde y Cameron de Bonnie, saliendo ella un momento para hablar con Vicky, que la llama desde la casa en que está trabajando como canguro de Julian y que le pide que tras el baile se pasen ella y Cameron por allí.

Y cuando regresa ve cómo Cameron, ya muy borracho, se besa con otra chica, por lo que se enfada y decide marcharse de la fiesta, yendo Cameron tras ella, para lo que debe quitarse los tacones, negando que haya pasado nada, observando ella que además tiene una petaca con alcohol. Y está tan borracho que cuando suena el teléfono de Allyson se lo quita y lo lanza al ponche, ante lo que ella decide marcharse, yéndose Oscar con ella.

Entretanto Laurie patrulla por la ciudad guiándose por la radio policial.

Tras acostar a Julian, Vicky recoge todo lo de la casa, recibiendo tras ello a Dave, que le dice que tienen la casa para ellos solos hasta que lleguen Cameron y Allyson.

Dave le muestra un tatuaje que se ha hecho porque espera que esa sea una noche que recordará el resto de su vida, tras lo que comienzan a besarse y a tocarse en el sofá, cuando Vicky escucha un ruido y envía a Dave a investigar, aunque él está convencido de que será Julian, que, en efecto aparece abajo, diciendo que ha visto a un hombre delante de su puerta con una cara rara en la oscuridad y le oyó respirar, asegurando que es el hombre del saco.

Vicky decide subir con él, pese a que el niño insiste en que suba antes Dave, aunque ella le muestra que no hay nadie en su cuarto, entrando a investigar para calmarlo, aunque de pronto escucha cómo le pide a alguien que se marche para terror de Julian, que ve que era solo una broma de su canguro.

Mientras trata de calmarlo y hacer que se duerma de nuevo, Dave sale a fumar, acercándose al garaje, donde descubre una magnífica moto que arranca, y simula conducir hasta que se le para el motor y se le cae.

Arriba, Julian, le pide a Vicky que cierre la puerta del armario, tratando ella de hacerlo, aunque no encaja, por lo que, tras intentarlo varias veces lo abre, saliendo de dentro Michael, que la golpea ante los aterrado ojos de Julian, que sale corriendo.

Vicky lo golpea con una silla, aunque Myers no se inmuta y la persigue hasta que ella resbala y cae, y, aunque trata de sujetarse a los barrotes de la escalera, Myers tira de ella, que grita llamando a Dave, mientras le pide a Julian que corra.

Myers la arrastra hacia la habitación, y Dave entra corriendo, alarmado por los gritos, aunque para entonces ya la apuñaló y acabó con ella.

Dave toma un cuchillo y sube las escaleras.

Poco después llega Hawkins junto con varios agentes más, debido a un aviso por altercado al lugar, en la Avenida Meridian 707, lo que Laurie escucha también, pidiendo a la gente que observa en la calle que se marchen y regresen a sus casas

Al subir a la habitación de Julian, Hawkins ve una calabaza en la pecera y a alguien sentado y con una sábana por encima a modo de fantasma, descubriendo al quitársela el cuerpo de Vicky.

Desde la calle, Laurie ve en otra habitación a Myers y le dispara, aunque en realidad es solo un espejo.

El agente, tras escuchar el disparo, sale corriendo tras él y le dispara, aunque sin éxito, encontrando al bajar al piso de abajo a Dave, que cuelga de la pared con un cuchillo que le atraviesa el cuello.

Myers avanza sin inmutarse, disparándole Laurie que parece rozarle, por lo que le busca para rematarle, aunque sin éxito.

Llegan poco después al lugar varios coches policiales más, y entre ellos uno que lleva al Doctor Sartain, aun herido, pero mejor, y explica que el furgón volcó cuando Myers atacó al guardia y al conductor y les dice que ha dejado de estar inactivo y solo sabe seguir adelante y matando.

Deciden patrullar con él, pues es quien mejor conoce a Myers.

Cuando Laurie pide a los agentes que dejen de perder allí el tiempo y salgan a buscarlo, Sartain se entera de quién es y le dice que ha leído todo sobre ella y Myers, rebelando que también en 1978 fue el agente Hawkins el primero en acudir cuando detuvieron a Myers y evitó que Loomis matara a Michael.

Ella le dice que rezaba cada noche para que se fugara y poder matarlo.

Allyson regresa con Oscar a su casa y se queja ante este de tener que dar siempre la cara por Cameron, pues cuando bebe no se controla, asegurándole Oscar que si Cameron no sabe valorar que ella es la mejor y la más guapa del instituto, está loco.

Mientras patrulla con Sartain, Hawkins le pregunta si cree que Laurie está loca, diciendo él que el miedo permanente puede cambiar a una persona y lo que le intriga es cómo afectan esos crímenes a Myers, si actúa aleatoriamente o impulsado por sus emociones y siguiendo unas órdenes que vienen de su interior.

Le recuerda al agente que Myers es propiedad del estado y no se le puede dañar.

Acuden a casa de Karen llevándolos a ella y a Ray a casa de Laurie, por su seguridad, aunque no consiguen hablar con Allyson, que no tiene el teléfono, por lo que le dejan un mensaje pidiendo que vaya a casa de su abuela, pues es más segura.

Oscar le muestra a Allyson un atajo, para el que deben saltar una valla e internarse en un jardín privado, intentando Oscar besarla, al no estar ya con Cameron, indignándose ella, ante lo que Oscar se excusa diciendo que está borracho y le pide perdón.

Pero ella se marcha y lo deja en el jardín, cuyas luces se encienden por los sensores, pidiendo él perdón al dueño del jardín, no sabiendo que quien está ante él no es el dueño de este, sino Myers, que, cuando se apaga la luz, lo ataca.

Él corre pidiendo ayuda mientras Myers lo persigue con su cuchillo, aunque Allyson cree que con sus gritos solo trata de llamar su atención. Muriendo agarrado a la valla acuchillado por Myers.

Allyson regresa finalmente tras dejar de escuchar sus gritos, viendo cómo el asesino lo ha ensartado en la valla, viendo también a Myers, por lo que, aterrorizada comienza a correr y a pedir ayuda, llamando en la primera casa a la que llega para que le abran.

Llega Hawkins poco después y decide llevarla con su madre, que en ese momento baja hasta el refugio de la casa de Laurie con su marido y que la devuelve a su infancia, un lugar que observa está repleto de botes de conservas y donde hay numerosas armas, asegurando Laurie que estaba esperando esa noche.

Durante el traslado, se cruzan con Myers, decidiendo Hawkins lanzar su coche contra él y lo arrolla, y, esperando acabar con él baja del coche dispuesto a dispararle, acercándose Sartain a Michael, en el suelo y sin sentido, pidiéndole a Hawkins que no lo mate, decidiendo, para evitarlo acabar con el agente con un cuchillo, ante los aterrorizados ojos de Allyson, encerrada en la parte trasera del coche policial, mientras Sartain le dice a Myers que ahora sabe lo que se siente al matar, colocándose la máscara de Michael mientras arrastra a este hacia el coche policial, colocándolo en la parte trasera, junto a Allyson, tirando la máscara junto a él, no comprendiendo que deseen acabar con ese hombre cuando tienen la oportunidad de entender la mente del mal, y que cuando se despierte estarán listos para la reunión con Laurie Strode, pues piensa que es lo que lo mantiene vivo, pensando que el hecho de ser un depredador o el temor a convertirse en presa es lo que mantiene con vida a ambos.

En su marcha hacia la casa de Laurie arrolla a Hawkins mientras le dice a Allyson que lleva muchos años trabajando con Myers, pero nunca fuera de un entorno controlado, y nunca le respondió a pesar de sus estímulos.

Tratando de ganar tiempo, Allyson le dice que habló con ella cuando mató a su amigo y le contará lo que dijo si la deja marcharse.

Sartain para en efecto el coche, siendo vista la sirena de este por dos policías que están cenando en su coche cerca.

Le pregunta si lo que dijo es el nombre de su hermana, Judith.

Justo en ese momento, Myers vuelve en sí, para horror de Allyson, que teme que acabe con ella, aunque lo que hace es empujar la mampara que los separa de la parte de delante golpeando a Sartain repetidamente contra el volante para luego arrastrarlo afuera del coche, momento que aprovecha Allyson para huir hacia el bosque.

Los dos policías cercanos, al ver que Hawkins no contesta a la radio, deciden acercarse.

Sartain, desde el suelo, le pide a Myers que diga algo, aunque lo que este hace es aplastar su cabeza con su enorme pie, destrozándola.

Los otros dos policías piden a Hawkins que conteste, saliendo del coche al no obtener respuesta, con su arma, viendo el cadáver del doctor.

En su casa, Laurie apaga todas las luces.

Allyson corre a través del bosque mientras su padre, en la casa vigila las cámaras.

Escucha la sirena de un coche policial y sale preguntando si saben algo de Allyson, observando al abrir el coche que los dos policías están en sus asientos, pero muertos, uno con el cuchillo de Sartain clavado en la cabeza y al otro le brillan los ojos como a una calabaza teniendo una luz dentro de su cabeza, viéndose él mismo sorprendido por Myers, que lo coge por el cuello y lo ahoga, comprendido Laurie, al escuchar el disparo de Ray que Michael está allí.

Le pide a Karen que baje al sótano mientras ella se dispone a enfrentarse a Michael, aunque este atraviesa el cristal con su mano y está a punto de ahogarle, consiguiendo ella en un último esfuerzo dispararla a la mano y liberarse.

Enciende tras ello las múltiples y potentes focos que instaló en el jardín para verlo.

Le dice a Karen que se equivocó criándola así, pero que la protegerá, aunque sabe que aquello era una jaula para ella.

A pesar de las barras en las puertas Michael logra entrar, esperándolo Laurie con su arma, escuchando sus pisadas sobre el techo, hacia el que dispara al ver su sombra.

Deja de escuchar el sonido y decide salir del búnker, aunque no logra ver a su enemigo, por lo que comienza a buscarlo por todas las habitaciones, cerrando con una verja cada estancia revisada, siguiendo finalmente un rastro de sangre que le lleva al piso superior, y hasta un armario, aunque dentro de este lo que encuentra es el cadáver de Ray.

Pasa a la habitación donde guarda los maniquíes con los que practica el tiro, viendo cómo de pronto Michael lanza un maniquí hacia ella y la ataca.

Laurie saca un cuchillo, pero él es demasiado fuerte y la agarra por el cuello, lanzándola tras ello por la ventana.

Llega entonces Allyson a la casa y llamando a su madre y a su abuela, saliendo Karen a buscarla y escondiéndola con ella en el escondite mientras Michael baja tratando de localizar su escondite, cogiendo Karen uno de los rifles de su madre mientras arriba Michael consigue mover el mueble que ocultaba la entrada.

Karen comienza entonces a llamar a su madre y le pide ayuda, simulando tener miedo y asegurando no ser capaz de hacerlo, viendo cómo asoma entonces Michael, y tras murmurar, "te tengo", le dispara, apareciendo Laurie detrás, y tras decirle, "Feliz Halloween, Michael", se abalanza con su cuchillo sobre él para rematarlo, aunque el asesino se revuelve y la golpea hasta la cocina, donde Laurie lo golpea repetidamente con una sartén, haciendo que caiga por las escaleras del refugio.

Allyson sube, yendo Karen tras ella, aunque Michael la agarra por la pierna y la arrastra escalera abajo, pidiéndole Laurie a Allyson que huya, aunque en vez de hacerlo coge un cuchillo que y se lo clava a Michael mientras sube, consiguiendo así Karen escape y golpee a Michael, que cae, poniéndose entonces en marcha un sistema que cierra el sótano con barras de hierro, encendiéndose entonces unas salidas de gas.

Laurie le cuenta entonces a Karen que no se trataba de una jaula, sino de una trampa, y lanza una bengala, haciendo que empiece un fuego que se extiende a todas las estancias de la casa, que arde entera, mientras las tres mujeres lo observan desde la parte trasera de una camioneta que las recogió, y donde Allyson continúa con el cuchillo sangrante en sus manos.

Calificación: 3