Malas tierras
Badlands (1973) * USA
Duración: 95 Min.
Música: George Tipton, Carl Orff, Gunild Keetman
Fotografía: Brian Probyn, Tak Fujimoto, Stevan Larner
Guion y Dirección: Terrence Malick
Intérpretes: Martin Sheen (Kit Carruthers), Sissy Spacek (Holly Sargis), Warren Oates (Padre), Ramon Bieri (Cato), Alan Vint (Diputado), Charley Fitzpatrick (Clerk), Gary Littlejohn (Sheriff).
1959. Diez años después de la muerte de su madre por neumonía, Holly Sargis, de 15, se traslada con su padre desde Texas hasta Fort Dupree en Dakota del Sur donde conoce a Kit Carruthers, un muchacho diez años mayor que ella que lleve el pelo a lo James Dean, al que trata de imitar, aunque trabaja de basurero. Y que la seduce.
Sabedora de que su padre no admitirá su relación con él por ser mayor y de una clase inferior, Holly comienza a salir y a acostarse con él a escondidas.
Hasta que su padre, pintor de carteles publicitarios se entera de la relación y la castiga matando a su perro y obligándola a ocupar su tiempo libre en clases de clarinete.
Pero Kit no se resigna y como el padre no cede va hasta su casa y le pide a Holly que recoja sus cosas para irse con él, disparando al padre de la chica cuando este trata de impedirlo.
Huirán tras ello, prendiendo fuego a la casa y tras grabar un disco donde Kit reconoce el asesinato y habla de su intención de suicidarse juntos él y Holly.
Se refugiarán tras ello en un bosque, a la orilla de un río, donde construyen una casita en un árbol, siendo felices durante un tiempo, dedicándose a entrenarse en el manejo de las armas, aunque deben robar fruta o gallinas alguna vez.
Cuando un día Kit trata de pescar disparando a los peces, delata su presencia, y pocos días después aparece un grupo de caza recompensas con los que Kit acabará tras sorprenderlos escondido en un refugio que había preparado.
Pero deberán abandonar su paraíso, ocultándose en una casa de campo que se encarga de cuidar Cato, antiguo compañero de recogida de basura, contra el que también acabará disparando al sospechar que pensaba traicionarlos y denunciarlos, debiendo marcharse también de allí cuando un día llegan los dueños de la casa a recoger algunas cosas y los encierra y dispara desde fuera sin comprobar si acabó con ellos.
Holly empieza entonces a sentirse horrorizada ante tanta violencia, sabiendo que toda la población está atemorizada ante tanto asesinato, siendo buscado por toda la policía.
Necesitados de comida, acuden a una gran mansión, donde permanecen unas horas antes de marcharse con el Cadillac del propietario y algo de comida para recorrer el desierto de Montana robando la gasolina de los depósitos de los caminos, y matando de vez en cuando una vaca con el coche para ahorrar munición y tener comida.
Pero Holly ya no se siente cómoda con él y cuando pasan cerca de Cheyenne y ve las luces de la gran ciudad decide que no desea seguir viviendo de ese modo.
Por ello en su una parada que hacen para conseguir gasolina junto a una prospección, cuando aparece un helicóptero ella decide quedarse allí y no seguir con Kit que huye solo tras acabar con uno de los pistoleros del helicóptero, mientras Holly se entrega al otro.
Un coche policial lo sorprende mientras reposta y debe huir internándose campo a través, hasta que los policías tienen un accidente, pese a lo cual se para poco después y espera a los policías pretextando tener una rueda pinchada, lo que él mismo provoca, dejándose detener sin oponer resistencia.
Entre los soldados de una base militar a la que lo llevan para trasladarlo a Dakota del Sur, y donde vuelve a coincidir con Holly, se muestra como una estrella.
Ella conseguirá la libertad condicional, casándose algún tiempo después con el hijo de su abogado, mientras él es condenado a morir en la silla eléctrica.