Pan negro
Pa negre (2010) * España / Francia
Duración: 108 min.
Música: José Manuel Pagán
Fotografía: Antonio Riestra
Guion: Agustí Villaronga (N.: Emili Teixidor)
Dirección: Agustí Villaronga
Intépretes: Francesc Colomer (Andreu), Marina Comas (Núria), Nora Navas (Florència), Roger Casamajor (Farriol), Lluïsa Castell (Ció), Mercè Arànega (Sra. Manubens), Marina Gatell (Enriqueta), Elisa Crehuet (Àvia), Laia Marull (Pauleta), Eduard Fernández (Mestre), Sergi López (Alcalde).
En la Cataluña rural de la posguerra Andreu, un niño de once años es testigo de la muerte de Dionís Seguí y de su hijo, despeñados, en lo que parece un accidente, aunque la guardia civil sospecha que se trata de un asesinato.
Dionís, y Farriol, padre de Andreu eran republicanos, y se ganaban la vida con la cría y venta de pájaros, al tener vedado el acceso a otro trabajo, estando siempre vigilados por el alcalde, que acusa a Farriol del asesinato.
Para no ser detenido Farriol decide huir a Francia, llevando antes a Andreu a la masía de verano de los Manubens, que su suegra y sus cuñadas cuidan, ya que Florencia, su madre, debido a los duros turnos de trabajo que hace en el taller textil no puede ocuparse de él.
En la masía conoce a su prima Nuria con la que se siente muy compenetrado, la cual le cuenta en secreto que su padre no está en Francia, como hacen creer a todos, sino que se suicidó tras volar los puentes del pueblo antes de la entrada de los nacionales.
También entabla amistad con un muchacho tísico de los que atienden en el convento y que vaga desnudo por el bosque, pese al temor que infunde a los demás.
Una noche sube al desván para investigar qué "fantasma" provoca los ruidos que vienen de allí, descubriendo que es su padre, que no pudo salir del país y se oculta allí, hasta que una noche se presentan el alcalde y la guardia civil y lo detienen acusándolo de los asesinatos.
Andreu y su madre acuden entonces a pedir ayuda a los Manubens, descubriendo los lujos con los que estos viven. Aunque solo consiguen una nota para el alcalde, que aprovecha la visita y la necesidad para acostarse con Florencia a la que siempre pretendió.
Andreu cree que el asesino es el conocido como Pitorligua, que se rumorea vive en el bosque, aunque Nuria le demuestra que este murió. Y Pauleta, la viuda de Dionís les cuenta que Pitorligua era marica y se acostaba con el hermano de la Manubens, la cual pagó a varios hombres para que le dieran un escarmiento, llegando en su brutalidad a castrarlo.
Andreu comprende que su padre fue el culpable junto con Dionís de aquel acto y obliga a su madre a confesarle la verdad. Ella reconoce que su padre aceptó el encargo porque por falta de dinero estaban a punto de perder la casa, pero que fue Dionís, quien se pasó de la raya.
Pocos días después de visitar a su padre en la cárcel el maestro le dice a Andreu que los Manubens desean adoptarlo y pagar sus estudios para que pueda ser médico como desea.
Cuando su padre es finalmente ejecutado, Pauleta acude a darles el pésame, aprovechando para acusar a Farriol de la muerte de su marido.
Les cuenta que, obligado a casarse por su hermana, el hermano homosexual de la Manubens murió joven y esta contrató a Dionís para robar las actas matrimoniales y así heredarlo todo, aunque Dionís los chantajeaba y los Manubens hicieron que lo mataran, encargando dicho trabajo a Farriol, del que ella no se explica su silencio durante el juicio.
Decepcionado al ver que su padre, que siempre hablaba de ideales era un asesino, Andreu rompe con rabia sus jaulas y mata a algunos pájaros, decidiendo aceptar la oferta de adopción de los Manubens pese a que había planeado con Nuria, a la que quieren poner a trabajar en la fábrica, huir.
Con el tiempo llegará a renegar de su madre cuando esta le visita en el colegio, pese a que le cuenta que su padre murió sin acusar a los Manubens a cambio de que estos le pagaran los estudios.