Te cuento la película

Suro

España (2022) *

Duración: 116 min.

Música: Clara Aguilar

Fotografía: Julián Elizalde

Guion: Mikel Gurrea, Francisco Kosterlitz

Dirección: Mikel Gurrea

Intérpretes: Vicky Luengo (Helena), Pol López (Iván), Ilyass El Ouahdani (Karim), Vicente Botella (Chema), Josep Estragués (Enric), David Parcet (Maurici), El Mustapha Mounaim El Amiri (Mohammed), Joan Carrillo (Ricardo), Nelson Caballero (Quim).

Tras el cierre de la cooperativa en que trabajaban, Helena e Iván son despedidos por sus compañeros, que les prepararon un vídeo y les felicitan por haber tomado las riendas de su vida y les piden una fiesta de inauguración de su nueva casa.

Luego bailan para terminar la fiesta.

Se trasladan al campo, a la casa que Helena heredó de su tía Dolors, esperando poder vivir del campo. Venderán el corcho de los alcornocales de su tía y harán un huerto, aunque sus ambiciones pasan por reformar la casa, para lo que deben consolidar las estructuras, aunque difieren en cómo debe ser la reforma, pensando él que conviene conservar la casa lo más fiel a la original, siendo ella más ambiciosa, e incluso hacer una piscina en el futuro.

El tío Enric les lleva además a Poum, un burro que era también de la tía y que tendrán que cuidar.

También les explica que Can Falcó, la finca heredada, tiene 500 hectáreas y que de los alcornocales podrían obtener entre 10.000 y 12.000 Euros aunque ellos tendrían que adelantar los sueldos, que son de 150 Euros al día por cada trabajador.

Además deben tratar de mantener todo limpio y tienen un depósito de agua lleno, pues el verano será muy seco y hay peligro de incendio y los helicópteros deben poder repostar en esos depósitos.

Van conociendo a algunos vecinos, a los que informan que han ido a vivir a Can Falcó, que era de su tía Dolors, aunque casi todos lo saben yo.

Conocen también a Maurici, con el que coinciden en la feria y que les dice que él trabajaba para Dolors y conoce muy bien la finca y se ofrece para trabajar para ellos y pelar el corcho en unas 6 semanas y pagándoles unos 20.000 Euros.

Ellos prefieren trabajar como su tío, con la cooperativa, pero tienen poco dinero y Maurici se encarga también de los sueldos, por lo que ellos podrán usar su dinero para hacer las reformas antes de que nazca el hijo que esperan, y al año siguiente ya lo harán con los cooperativistas.

Iván está decidido a sumergirse de lleno en el trabajo y tiene ganas de aprender el trabajo, por lo que madruga para ser el primero en llegar, antes de que lo hagan los trabajadores el primer día, comenzando el trabajo cuando es todavía de noche.

Al verlo allí, algo poco habitual, Maurici le pide que les hable a los trabajadores como inicio de temporada para que no piensen que les quiere controlar.

Él les dice que quiere que trabajen juntos. Que no sabe cómo se hace, pero quiere aprender y estar como ellos.

Los trabajadores comienzan afilando sus hachas y él observa cómo trabajan, observando que hay un grupo de ellos que son marroquíes, preguntándole a Maurici si los tiene dados de alta, diciéndole este que en su trabajo hay temporadas en que sí y otras en que no, pero ellos están muy contentos y hacen muchos años que se dedican a eso.

Va a visitarlo Helena. que le pide que se vaya con ella a comer, aunque él dice que si lo hace no le tendrán respeto y que hará la jornada como los demás.

Ella prueba a pelar uno, aunque Iván le dijo que se tardaba años en aprender a hacerlo, diciéndole Iván que ella no está para eso, negándose a ir con ella a comer.

Luego, en casa, le muestra a Iván el proyecto de arreglo, aunque a él le parece que no pega mucho con el entorno y es muy pijo y no lo considera respetuoso con el entorno.

Discuten además por los magrebíes, diciendo ella que no es su problema lo de su alta, que eso es cosa de Maurici, indicando él que sí lo es, diciendo ella que entonces los trabajadores perderán el trabajo y ellos su dinero.

Además Helena está preocupada por tener el depósito listo, pero él insiste en que no tiene tiempo y debe ir a trabajar, cargando con los paneles de corcho.

Él come con los magrebíes, que le cuentan que llevan muchos años con el corcho en Marruecos y en Andalucía, y se quejan entre ellos de la casa donde están.

Un día Helena se va con el coche y regresa con un todoterreno, no entendiendo él que lo haya hecho sin hablar, diciendo ella que con el otro apenas podían moverse por allí porque rascaban los bajos.

Le intriga Karim, el magrebí más joven, que no habla español y que está marginado también por los demás marroquíes, y un día lo sigue, viendo que se aloja en una casa que no reúne las mínimas condiciones de habitabilidad, compartiendo con él un porro y jugando luego con él al fútbol, tras llevarlo a su casa.

Pero a Helena no le parece bien su decisión y le dice que eso debía haberlo hablado con ella antes, recordándole él, resentido, que ella no habló con él cuando cambió el coche, diciendo ella que eso es más importante, indicando él que estaba en unas condiciones terribles, diciendo ella que ese es un problema de Maurici, no suyo, respondiendo él que Maurici volverá hacer lo mismo. Que sus compañeros lo ignoran y está solo y solo tiene 18 años.

Pero ella le asegura que no la hará sentirse mal. Que él necesita hacer eso para sentirse bien, pero que ella no quiere que meta extraños en "su propiedad".

Él le dice que antes de ir allí ella no hablaba así, diciéndole ella que van a tener un hijo y las prioridades cambiaron.

Él dice que solo trata de vivir conforme a sus ideas y transmitírselas a su hijo.

Ella dice que es fácil ser idealista apasionado cuando hay alguien que se encarga de las cosas de las que él no se quiere ocupar o cuando alguien trabaja mientras él tiene su cuenta a cero.

Pero tras ello Iván se levanta enfadado e indica que no pueden tenerlo en las cuadras como si fuera un animal, diciendo ella que si sube acabará cenando allí cada noche, pese a lo cual él va a buscarlo y lo sube y hace que se siente con ellos en la mesa.

Helena habla con él en francés, no pudiendo hacer lo mismo Iván, porque no lo habla.

Pero su gesto no es visto bien ni siquiera por los compatriotas de Karim.

Pero cuando Karim te empieza a decir que le duele la espalda, Iván le deja claro que tiene que trabajar e incluso le corrige cuando lo hace mal.

Maurici se queja porque van muy lentos y si se levanta la Tramontana se secará todo y no podrán sacar los kilos que esperaban, pues con el viento no se despega el corcho.

Vuelve Karim antes a casa, encontrando a Helena comenzando a cavar para el huerto, ayudándola él.

Ella insiste en que deben arreglar lo del depósito, pues si hay un incendio es necesario, aunque él dice que ahora tienen que trabajar más debido a la Tramontana y no tiene tiempo, diciendo ella que entonces se llevará a Karim y le pagará el jornal.

Y, en efecto, entre los dos consiguen reparar el depósito, y luego, mientras descansan, ella le pide que le deje escuchar el hip hop de "El Grande Toto", y comparten un cigarrillo.

Cuando regresan, ven que Iván se dejó la valla abierta y se escapó el burrito.

Cuando lo encuentran ven que está agonizando, debiendo dispararle para que no sufra, aunque ella, al ver que Iván no termina de hacerlo coge la escopeta y lo hace ella.

Esa noche hacen el amor de forma apasionada.

Maurici les advierte que si no llegan a las cantidades indicadas no podrá pagarles las jornadas completas, pues no le salen los números.

Chema le pide a Karim que se ponga debajo para poder subirse encima de él y pelar un alcornoque más alto, aunque el muchacho lo siente como una humillación y se mueve, haciendo que Chema caiga, cortándose varios dedos, debiendo llevárselo al hospital.

Los catalanes se rebelan con Karim, y, aunque este dice que fue sin querer, los demás no le creen. Ni siquiera los marroquíes, enviándolo Iván a casa para evitar enfrentamientos, ya que, dice fue un accidente.

El viento comienza a soplar con fuerza. Helena escucha un ruido y encuentra a Karim llorando en la ducha, pidiéndole perdón a ella y diciéndole que le ayude.

Entretanto, en el alcornocal, cuando regresa Maurici, les dice que Chema está estable, pero que perderá los dedos, pues tenía los tejidos muertos y advierte tras ello a Iván que debe hacer que Karim se marche si no quiere que todo se complique.

En casa, Helena consuela al muchacho y le dice que todo irá bien, pero cuando llega Iván, le dice que tiene que llevarlo a la estación de autobuses, aunque Karim dice que no se irá sin su dinero, aunque ahora es Iván el que dice que no, siendo Helena la que le dice que le tienen que pagar, diciendo Iván que se lo pida él a Maurici, diciendo ella que se lo darán ellos.

Pero Iván tira del chico para llevárselo, abofeteándolo Helena que le dice que no puede tratar así a la gente y le dice que vaya al banco y le pague, respondiendo él: "sí, jefa", tras lo que se marcha al bar.

Llegan entonces los amigos de Chema a buscar al muchacho, pidiéndoles Helena que se marchen, aunque asustado, Karim sale corriendo, viendo ella cómo lo persiguen pese a que les pide que paren, internándose en el bosque.

Cuando llega Iván ve allí los coches y Helena sale con la escopeta, cogiéndola él, que le pide a Helena que se quede, yendo hacia el bosque con el arma y con una linterna.

Los ve golpeando y pateando al chaval, diciéndoles él que basta ya, que el chico ya lo entendió, diciéndole los que lo encontraron que no debería estar allí, que no es ese su sitio, recordándoles Iván que esa es su finca y les pide que lo dejen o serán ellos los que no sepan quién está en su sitio, consiguiendo así que los atacantes se marchen.

Helena ve a los hombres que llegan frente a su casa y cogen sus coches y se marchan, viendo también acercarse luego a Iván cargando con Karim, al que sube en el coche, y con el que se marcha sin pasar por casa.

Helena fuma un cigarrillo fuera, mientras sopla el viento y lo tira al suelo, donde comienza a prender las hierbas secas de su alrededor, aunque luego lo apaga.

Al año siguiente Helena va al bosque, donde están los trabajadores con la faena y ve a Iván, que ya no solo carga con el corcho, sino que también lo está sacando, habiendo otro muchacho haciendo el trabajo que hacía Karim.

Realizados los cambios que Helena ideó para la casa, hacen una fiesta para la inauguración, estrenando también la piscina, donde tiran trozos de corcho, sobre los que tratan de correr como si fuera una pasarela.

Pone para bailar la música que escuchaba Karim y baila alocada y muy borracha. Para acabar llorando cuando quitan la música.

Una noche se despiertan al escuchar una alarma, comprendiendo que se ha declarado un incendio, por lo que salen corriendo, viendo los reflejos de este a lo lejos.

Se sientan fuera con las mangueras preparadas, esperando por si llega el momento en que necesiten utilizarlas, preguntando él qué tienen que hacer, diciendo ella que defender la casa.

Calificación: 3